Mario Rodríguez se reivindica con un gol que tiene un valor triple

El gol de Mario Rodríguez en el último suspiro del partido contra el Tarazona fue muy importante. De hecho, tuvo valor triple: sumó tres puntos que colocan el equipo junto al play-off de ascenso, reforzó la confianza del técnico Dani Vidal y también supuso una venganza personal contra el Tarazona.

Mario Rodríguez es el único jugador que llegó este verano procedente de una categoría inferior. El barcelonés, formado en la base del Real Madrid, disputó la última temporada en la SD Compostela de Segunda Federación. Allí despuntó como un extremo hábil y con mucha facilidad de encontrar portería. De hecho, marcó un total de 12 goles en tierras gallegas. Rodríguez tenía que adaptarse a una Primera Federación exigente y, además, juega en una posición en la que hay más competencia.

Con Andy Escudero, David Concha y Jaume Jardí, Mario empezó la temporada con el papel de revulsivo. El barcelonés aceptó el rol y, de hecho, aprovechó los minutos para mostrar sus virtudes en las jugadas individuales. Contra el Rayo Majadahonda tuvo el gol de la victoria cerca, después de driblar dos defensores, sólo la mala fortuna con los dos palos evitaron que se estrenara con la camiseta grana. Su presencia se diluyó e, incluso, no entró en la convocatoria en las salidas contra el Lugo y el Fuenlabrada.

Mario reapareció contra la Real Sociedad B y fue uno de los principales argumentos de la reacción grana. Poco a poco, Mario empezó a mostrar los detalles de calidad que lo hicieron despuntar con el Compostela. El extremo aportó velocidad, desequilibrio y valentía en el último tramo del campo, y eso le permitió ganarse el lugar en el once.

Con todo, su primer gol con la camiseta del Nàstic llegó de nuevo con su rol como revulsivo. Contra el Tarazona, Mario Rodríguez se vistió de héroe y despertó al ataque grana. El barcelonés entró a falta de diez minutos para la finalización del partido y generó más de una ocasión hasta conseguir desmarcarse en la última jugada y definir a la perfección un gol que lo vuelve a poner en el centro de atención.

El gol de la venganza

El gol del domingo fue una venganza personal del extremo hacia el Tarazona. La última temporada, con el Compostela, Mario consiguió disputar el play-off de ascenso a Primera Federación, pero no alcanzó el ascenso. El verdugo fue, precisamente el Tarazona. El extremo destacó en la ida. Con un doblete, encaminó la eliminatoria con un 3-2, pero en la vuelta el Tarazona fue superior.

De esta manera, el gol del domingo cerró el hat-trick personal contra los aragoneses y culminó la venganza birlando los tres puntos. Con el empuje del gol, Mario buscará seguir la dinámica en el once contra la SD Logroñés. Aunque el extremo se perdió el entrenamiento de ayer por enfermedad, se espera que esté disponible el domingo.