El Nàstic saca tres puntos de oro del barro (0-1)

El Nàstic da un golpe sobre la mesa. Los grana suman tres puntos en el barro en un partido sufrido, pero bien resuelto por un conjunto grana que ha mostrado un juego sólido y contundente. Marc Fernández marcó el único gol del partido en una jugada de estrategia y los grana supieron sufrir para aguantar el Arenteiro en un estadio que parecía más una trinchera que un campo de fútbol. Entre el agua, los hoyos y el barro, un campo totalmente impracticable, los grana sacaron tres puntos importantísimos para recuperar la confianza.

El Nàstic salió al Estadio de Espiñedo a morder. El equipo estaba dolido de la dura derrota contra el Teruel y así lo hizo notar la entrada de la primera mitad. Dani Vidal estableció una serie de cambios al once con el retorno de Pol Domingo y Joan Oriol en los laterales y Marc Fernández para reestructurar el ataque del equipo con Godoy como punta sustituyendo al sancionado Pablo Fernández. En medio del campo, Gorostidi entró por Andy Escudero. Con estos hombres y un terreno de juego más parecido a una trinchera, los grana salieron a tomar la iniciativa.

Marc Fernández tuvo la primera del partido con un chute des de la frontal del área que se tropezó a manos de Diego García, el portero rival. Este era el primer aviso de un Nàstic que no se quiso dejar asustar por un terreno de juego impracticable. El más activo fue Álex Mula que, en su segunda titularidad, lideró los ataques grana por la derecha.

El Arenteiro es el segundo mejor local de la categoría y demostró por qué. Los gallegos están totalmente adaptados en su estadio y, después de resistir los primeros veinte minutos, empezaron a picar piedra para hacer daño a la defensa grana. Su estrategia era evidente, una vez pasada la línea de cal del medio del campo, colgaban centros al área sin pensárselo dos veces. De hecho, tuvo una buena cuando la centrada de Pibe cogió la espalda en Dufur, pero que Varo estuvo atento para cogerle el esférico en Santos justo antes de su remate.

Les ocasiones granas no eran pocas y casi todas los protagonizó Alan Godoy. La primera, el delantero canario resolvió un buen contraataque de Marc Fernández con un remate con el interior de la bota que Diego García  atrapó. A pesar de todo, el Arenteiro empezó a calentar el partido con un empujón sobre Mula que casi tira al suelo a Dani Vidal de rebote. El árbitro no pitó nada aunque el linier había visto la jugada y eso provocó el enfado de Mula. En unos minutos, el duelo se centró en empujones y entradas a destiempo que acabó con unas pocas tarjetas amarillas a ambos lados.

El Nàstic no es desconcentró y acabó la primera parte siendo superior. Primero, Álex Mula lideró un contraataque que acabó en una de las mejores ocasiones de la primera parte. Delante de dos defensores, vio el agujero en medio para ceder el esférico a Godoy. Con todo, la definición del canario fue muy mala y salió a la derecha del portero. Fue una lástima, porque el movimiento para ganar la espalda de los centrales fue excelente. En menos de un minuto, Godoy tuvo otra. Marc Fernández ganó el duelo al portero gallego después de una muy mala salida. Godoy tenia la pelota y la portería vacía, pero su chute lo atrapó un defensor rival para evitar el 0-1. De esta manera, el Nàstic se marchó al descanso con buenas sensaciones, pero sin el premio del gol. Pero eso cambió muy pronto.

Los grana volvieron a empezar con fuerza a la salida de la segunda parte  y con la portería entre ceja y ceja y lo consiguieron con la especialidad de la casa: las jugadas en pelota parada. El Nàstic consiguió una falta a unos metros del medio del campo y la convirtió en la jugada del gol. Mula y Borja Martínez protagonizaron una jugada común esta temporada. Los dos jugadores fingieron la centrada dos tiempos y, finalmente, Mula la envió el área. Sanz la peinó al centro y allí estaba Marc Fernández para enviarlo al fondo de la red.

Con la ventaja en el marcador, los grana se reorganizaron en una sólida defensa. Mula y Marc Fernández se vaciaron completamente para ayudar en esta formación. Con el partido controlado, Vidal dio minutos a Gorka Santarmaría, pero los grana no pudieron matar el duelo a pesar de las oportunidades. El Arenteiro estaba vivo y, con el paso de los minutos, ganó bastante. Tocaba sufrir, las centradas y los remates llegaban por todas las esquinas, pero siempre aparecía alguien. Borja Martínez y Dufur estuvieron allí donde Varo no pudo y, con sufrimiento, los grana se llevaron el partido.

Con este resultado, el Nàstic dejó al Arenteiro por primera vez esta temporada sin marcar en casa y batió al segundo mejor local, por detrás de los grana, para recuperar momentáneamente el liderazgo. La Ponferradina perdió contra el Fuenlabrada y el Nàstic es líder a falta del resultado del Deportivo. Precisamente, el conjunto gallego será el siguiente rival grana y podría aterrizar en Tarragona líder si gana el Lugo. Dani Vidal, Gorostidi y Jaume Jardí s eperderán el duelo. El primero por  una expulsión rigurosa en el último minuto por protestar y el segundo y tercero vieron la quinta amarilla.