Dani Vidal ya ha escogido su once titular

Muchos entrenadores tienen la manía de encontrar una estabilidad en los onzes iniciales. Después de una pretemporada llena de rotaciones y diferentes combinaciones, Dani Vidal ha encontrado entre los veintitrés hombres que conforman la plantilla, a sus once jugadores de confianza. De hecho, en las tres primeras jornadas de competición, el técnico sólo ha realizado un único cambio al esquema.

Los grana han empezado la competición con dos empates y una victoria, pero en todos estos duelos ha habido casi los mismos protagonistas sobre el césped cuando el árbitro ha pitado el inicio del partido. Alberto Varo, Pol Domingo, Unai Dufur, Antonio Leal, Joan Oriol, Óscar Sanz, Ander Gorostidi, Víctor Narro, Jaume Jardí y Pablo Fernández han sido siempre los escogidos. El último domingo contra el Amorebieta se vio un único cambio, pero fue por motivos tácticos, dando entrada a Montalvo por Antoñín para utilizar a un 4-2-3-1.

Muchos de estos jugadores son piezas casi insustituibles al once. Alberto Varo demostró contra el Amorebieta porque Dani Rebollo lo tendrá difícil para birlarle el lugar. El duelo fue de pocas ocasiones, de hecho, Varo sólo tuvo que actuar en dos, pero cuando lo hizo, fue salvador. El Águila de la Canonja voló en la segunda mitad para parar la falta de Julen Jon Guerrero, un paro de mérito de la Zamora de la última campaña.

En los dos laterales la situación es la misma. Joan Oriol y Pol Domingo ponen cada partido muy difícil el listón a igualar para su competencia. El capitán fue clave en la victoria del último domingo. De hecho, ha sido clave al once del Nàstic desde la existencia de la Primera Federación. En este tiempo, sólo las sanciones por acumulación de tarjetas lo dejaron fuera de una titularidad. En la otra banda, Pol Domingo es un dominador claro. Ya le ganó la partida a Tirlea los últimos cursos y, este año va por el mismo camino.

En la parte ofensiva, Víctor Narro y Jaume Jardí han mantenido la titularidad por calidad y por necesidad. Con David Concha fuera de juego por sanción, Vidal sólo tiene tres jugadores de lado, con Mario Rodríguez como el tercero en discordia. Marc Fernández, Álex Jiménez e, incluso, Nil Jiménez, pueden actuar en las bandas, pero son más un recurso que una opción para desbancar a los titulares. De la misma manera, Pablo Fernández que, más que fundamental, su presencia define el ataque del Nàstic. Antoñín es su escudero en el sistema 4-4-2, mientras que Jiménez justo acaba de llamar en la puerta.

Eso sólo deja dos demarcaciones que podrían ver cambios. En medio del campo, Óscar Sanz es el rey. El jugador ha mostrado que su estado de forma actual y su polivalencia le han otorgado la mayor de las confianzas de Dani Vidal. Contra el Amorebieta, y también contra el Ourense, acabó como central. Eso abre la puerta en medio del campo. De momento, Ander Gorostidi, por méritos propios, también es un referente en el once. Ya lo hizo al final de la temporada pasada, para desbancar al titularísimo Borja Martínez, y así ha empezado este año, dejando en Montalvo en un papel más secundario. También se ha quedado en la sombra Álex López. El jugador llega con cartel y buenas expectativas, así que habrá que ver la decisión de Vidal una vez esté al 100%.

En el eje de la defensa, de momento Unai Dufur y Antonio Leal han sido la pareja de referencia. Los dos han ido de menos a más, siendo Dufur quién ha dado el paso adelante y Leal el más castigado por las tarjetas. Como tercero en discordia, más bien en cuarta posición de la cola si contamos a Óscar Sanz, está Gorka Pérez. El central tiene molestias físicas desde el último partido de la pretemporada y habrá que ver si su ostracismo sólo está ligado al físico, o se debe a la competencia.

Sólo se han disputado tres jornadas y la temporada es larga. El trabajo de los jugadores del banquillo es dificultar la elección de Vidal. El tiempo dirá si eso es posible o no.

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