Tortosa viaja un año más al siglo XVI con la Festa del Renaixement

Con la solemne aperturade las puertas de la ciudad, el Ayuntamiento de Tortosa, o los procuradores estos días, y el Seguici de Familias Nobles ha dado el pistoletazo de salida a la 21ª edición de la Festa del Tortosa. El conseller de Territori, Josep Rull, ha sido el pregonero en el acto de inauguración de esta recreación histórica que mantiene un programa continuista respecto de las últimas ediciones.

El Renaixement ha consolidado en las últimas ediciones los espacios que tomarán desde este jueves comediantes, actores, malabares, músicos y 'troupes' de gente venida de todas partes durante los próximos cuatro días. La edición de este año mantiene la apuesta por la internacionalización, con una sesentena de compañías procedentes de siete países diferentes, sobre todo francesas. Se harán más de cien actuaciones diarias. También repiten los clásicos como la Taberna de Enrico, que este año cambia de emplazamiento y se sitúa en la plaza Ben Saruq, en el barrio de Remolins.

Además de la Taberna de Enrico, también destaca entre los espectáculos 'In Commedia', producida por el grupo local Lo TAT y que se podrá ver en la Plaça de l'Absis. También 'Molt soroll per res', coincidiendo con los 400 años de la muerte de Shakespeare, que se representará en el Palau Episcopal. La coral La Binota está detrás del espectáculo 'La pazzia senile', que se hace en el patio del convento de la Puríssima.

Este fin de semana se podrá revivir la Entrega de estandartes en las familias nobles, la Marxa de Trasts, el Gran Desfile del domingo, el Baile de Máscaras, el Juramento de archivistas de la ciudad, la Misa de época o los séquitos de procuradores. Los abanderados de Tortosa y de Corion (Italia), un espectáculo de lucha de espadas, los ya clásicos Ourobouros o los Errantesfranceses, irrumpirán desde los lugaresmás insospechados para hacer sus actuaciones. La ruta de la Saboga, con las tabernas repartidas por toda Tortosa, el Mengeu de Festa, con los manjares propios del Renaixement que podrán degustarse en los restaurantes, y los comerciantes, que ponen el mostrador en la calle para sumarse al bullicio, permitirán al visitante vivir la fiesta con los cinco sentidos.