GEPEC pide que se anule la construcción de dos pistas forestales en la Serra de Cardó
Denuncian que se han aprobado y adjudicado las obras en un espacio protegido sin someterlas al trámite de evaluación de impacto ambiental
GEPEC-Ecologistes de Cataluña pide que se anule la construcción de dos pistas forestales en el espacio protegido de la Serra de Cardó, un proyecto promovido por el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (DAP) de la Generalitat de Catalunya. Los ecologistas denunciaron estas obras el pasado mes de febrero, ya que consideran que podrían comportar «unos impactos irreversibles sobre el patrimonio natural, cultural y paisajístico de esta sierra». Además, acusan en el Departamento de Aprobar y adjudicar la empresa ejecutora de las obras sin someter las actuaciones al trámite de evaluación de impacto ambiental. En caso de que el proyecto siguiera adelante, GEPEC iniciará los trámites legales para invalidarlo.
Las obras consisten en la apertura de dos pistas forestales de más de 4 kilómetros, de las cuales una atravesaría el corazónde la sierra de Cardóprovocandoun elevado impacto paisajístico. Esta pista se quiere construir sobre el antiguo camino de real de Tivenys al Perelló, el único camino originario de la edad media que todavía conserva el los rasgospropios de los caminos reales de las sierras de Cardó-Boix. Así, el GEPEC denuncia que el proyecto supondrá «eliminar completamente este patrimonio cultural, histórico y humano». Hace falta tener presente que la sierra de Cardó es incluida en la red europea de espacios naturales protegidos, XarxaaNatura2000 y forma parte de uno de los tres núcleos de la Reserva de la Biosfera de las Tierras del Ebro.
Las obras se iniciaron sin someterse a la evaluación de impacto ambiental
GEPEC-Ecologistas de Cataluña acusan al Departamento de Agricultura de aprobar y adjudicar a la empresa ejecutora unas obras dentro de un espacio protegido sin someter las actuaciones al obligado trámite de evaluación de impacto ambiental, hecho que la asociación tilda «muy grave» y asegura que «supone una vulneración del ordenamiento legal que tiene que comportar la anulación de toda la tramitación y dejar sin efecto la aprobación y adjudicación del proyecto». El hecho se agrava a causa de la ejecución de las obras previas incluidas al proyecto. La construcción de las pistas no se iniciaron gracias a la
denuncia presentada por el GEPEC-Ecologistes de Cataluña.
Ahora el Departamento de Agricultura ha tramitado el proyecto para que las actuaciones previstas sea sometido a la evaluación de impacto ambiental, que determina si el proyecto se puede llevar a cabo y en qué condiciones, por|para así intentar«llenar el expediente», según GEPEC. En este caso las actuaciones previstas han estado ya aprobadas e incluso adjudicadas a la empresa ejecutora, la empresa Aprofitaments Forestals Colldejou S.L, porun valor de 128.500 euros, iva excluido. De esta manera, GEPEC considera que someter esta actuación a la valoración ahora es «un fraude que vulnera la normativa», por eso pide que se anule el proyecto.
GEPEC iniciará los trámites legales para invalidar el proyecto si sigue adelante
Con el fin de pedir la anulación del proyecto, GEPEC-Ecologistes de Cataluña ha presentado un escrito ante|delante de el Departamento de Territorio y Sostenibilidad, que es quien tiene las competencias de las evaluaciones ambientales. En caso de que el proyecto siguiera adelante, GEPEC iniciará los trámites legales para invalidarlo. También se está preparando una denuncia ante instancias europeas por vulneración grave de las directivos europeas que regulan las evaluaciones de impacto ambiental, así como como por afectaciones graves de un espacio sometido a protección europea incluido en la Red Naturaleza 2000. También se denunciará la afectación de especiesprotegidas por la legislación europea.
El argumento del DARP para construir las pistas es su utilidad en los trabajos de extinción de incendios forestales, pero GEPEC cree que estas pistas serían «inútiles» y no serían utilizadas por los bomberos «porla peligrosidad que comportaría ubicar personal en lugares dondeel fuego llegaría con virulencia y sin posibilidades de control». La asociación ecologista también ha hecho llegar estos argumentos en el Departamento de Agricultura.