Desarticulan dos grupos organizados que se dedicaban a la pesca ilegal con redes electrificadas
Los cinco detenidos capturaban toneladas de pescado para venderlas posteriormente y lucrarse económicamente
La Guardia Civil, la Policía Local de Tortosa y Agentes Rurales han detenido a cinco integrantes de una organización criminal formada por dos grupos organizados que se dedicaban a la pesca con herramientas prohibidas mediante el uso de utensilios eléctricos y redes de grandes dimensiones. A los detenidos en esta operación conjunta, denominada Electrofishing, se los imputa de un delito de pertinencia a organización criminal, contra la flora y la fauna y contra la salud pública.
Los agentes de los diferentes cuerpos tuvieron conocimiento a partir de varios operativos para la protección de la biodiversidad y de la colaboración ciudadana que un grupo de personas de nacionalidad rumana se podría estar dedicando a la pesca ilegal en la cuenca del río Ebro con métodos de pesca no selectivos. Para hacerlo utilizaban herramientas de pesca eléctricas de fabricación casera y redes de gran tamaño, con lo cual conseguían una gran cantidad de pescado en poco tiempo que después vendían para lucrarse económicamente.
En las investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil, la Policía Local de Tortosa y los Agentes Rurales se tuvo conocimiento que estos grupos actuaban de noche en zonas remotas y de difícil acceso, además de establecer turnos de vigilancia para no ser descubiertos por la policía. También averiguaron que uno de los grupos tenía una vivienda a las afueras de Tortosa donde guardaba el material utilizado y almacenaba las capturas en un congelador industrial hasta su posterior traslado a Rumania.
Los agentes detuvieron la noche del pasado 8 de noviembre a dos individuos de nacionalidad rumana y pertinentes a la organización que conducían un vehículo con 200 kilos de pescado de varias especies, una embarcación de ocio y herramientas de pesca eléctricas. Los individuos volvían de realizar la pesca de forma ilegal. Por otra parte, la noche del 12 de noviembre los agentes detuvieron a tres individuos más del grupo y también de nacionalidad rumana en un control en los accesos de Tortosa. Los detenidos transportaban aparatos de pesca eléctricos, una embarcación de ocio y más de 50 ejemplares de Sirulos, Carpes y Lucios con un peso de 412 kilos. Se estima que cada uno de los grupos capturaba una media de 400 kilos de pescado por jornada.
Además de las detenciones, también se hizo un registro domiciliario en la vivienda de Tortosa, donde se encontraron varias embarcaciones, utensilios eléctricos para la pesca de fabricación propia, redes de pesca masiva, material eléctrico para modificar las artes de pesca y un contenedor isotérmico industrial. En el interior había más de 80 ejemplares de diferentes especies de pescado que constituían un total de 427 kilos.
Los detenidos han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Tortosa.