La Cooperativa de L'Aldea descarta el cierre al obtener los primeros beneficios en años
El consistorio y la entidad impulsan una jornada gastronómica con productos de la huerta para reforzar «la autoestima» de los campesinos
El ejercicio de 2016 será el primero, en años, en que la Cooperativa de L'Aldea, en el Baix Ebre, cerrará con beneficios reales. La entidad ha visto como la ola polar, que ha afectado al sector en toda Europa, ha disparado sus ventas y los precios de los productos. En el 2017 ha arrancado «con buenas perspectivas» y estos resultados han hecho que los dirigentes de la Cooperativa de L'Aldea descarten ahora la opción de cerrar la entidad, la salida que consideraban prioritaria hace sólo unos meses. «Venderemos los activos que no nos interesan pero la esencia es seguir y remontar», ha asegurado el presidente Miguel Carles. De hecho, la venta de patrimonio y las indemnizaciones que pueda determinar el proceso judicial siguen siendo el único camino para hacer frente al retorno de los ahorros de los impositores entrampados. Tampoco se descarta encontrar a un socio capitalista que asegurara la continuidad de la actividad agrícola. Esta opción se ha empezado a sondear. El próximo domingo, se celebrará una jornada de 'Cocina y Horta' en L'Aldea, con el objetivo de generar «autoestima» entre el sector y que los afectados por la quiebra de la Cooperativa no pierdan «la esperanza» de recuperar sus ahorros.
Justo cuando se han cumplido cinco años de la quiebra de la Cooperativa de L'Aldea y la sección de crédito, y con 4,47 millones de euros pendientes de devolver a los impositores, la situación económica de la entidad respira optimismo, por primera vez en años. A pesar de que hace sólo unos meses, la nueva junta de la entidad apostaba para vender los activos al mejor precio posible y enterrar la entidad «con honores», ahora la liquidación no es una solución que quieran tener en cuenta. «No tiene ningún sentido liquidar cuando hay rentabilidad a la cooperativa», ha defendido su presidente Miguel Carles. De hecho, el responsable de la entidad agrícola aldeana ha remarcado que su situación geográfica, la gran diversificación de producto con que se trabaja y la modernización del sector ebrenc la hacen competitiva para «seguir y remontar».
«Hay dinero para empezar el 2017. Hacía años que esto no pasaba», ha explicado el presidente. Desde el concurso de acreedores los beneficios que se generaban eran «contables» y se destinaban a quites. «Estamos contentos de empezar a darle la vuelta, a pesar de que es un trabajo quirúrgico. Cada euro que tenemos que cobrar ya sabemos donde se tiene que invertir pero la cooperativa se mantiene viva y puede defender mejor sus intereses mientras espera las famosas sentencias judiciales, que serán largas», ha dicho Carles. También se mantiene la necesidad de vender los activos que «no son rentables», como pueden ser fincas o almacenes, y no se cierran las puertas a vender las instalaciones a un gran inversor o a encontrar un socio capitalista. «Por ética, primero tenemos que vender los activos menos rentables, pero si un inversor pone suficiente dinero, no se podría decir que no», ha apuntado Carles. De hecho, esta alternativa se ha empezado a sondear.
Ventas disparadas
La producción de la Cooperativa de L'Aldea alcanza unas 180 hectáreas actualmente. Se trabaja con un centenar de campesinos pero poco más de una decena aglutinan el 90% de la producción. Durante el 2016, se han comercializado unos 3 millones de kilos y unidades de producto de la huerta y desde hace unas semanas, se trabaja con una demanda disparada por la falta de hortalizas en toda Europa. «De cada cinco pedidos podemos cumplir uno. El frío ha perjudicado unos en beneficio de otros. En Italia, Francia, Bélgica y también en el sur de España, se ha helado todo y queda la Costa del Mediterráneo, dónde somos los mejor situados», ha remarcado Carles.
Promoción del producto
Con este contexto, la entidad agrícola y el Ayuntamiento de L'Aldea se han unido para incrementar las medidas de promoción del comercio y del producto de la huerta del municipio. «Puede ser un punto de partida para elevar la cooperativa, salir adelante y poder cumplir el convenio con los impositores», ha defendido el presidente. También el alcalde Dani Andreu ha presentado el acto gastronómico del próximo domingo, «no como una fiesta o una alegría», sino como «un acto de esperanza» para resolver una situación que ha generado «tanta tristeza» al municipio y que «todavía no se ha resuelto». «La generación de beneficios puede dar continuidad a una industria que genera puestos de trabajo, puede hacer que los agricultores confíen y que genere confianza que el sector primario de L'Aldea puede continuar y que los afectados podrán recuperar sus ahorros», ha dicho Andreu.
En el acto de domingo participarán los cocineros Fran López, Hèctor Rueda y Joan Esteller, que prepararán una paella de arroz con verduras. El chef Lòpez, doble estrella Michelin, hijo de L'Aldea, ha participado, este viernes, en la presentación de la jornada explicando a un grupo de escolares la importancia del trabajo, en la cocina, con productos de proximidad y de las líneas de trabajo para convertir un producto de la huerta en un plato lleno de creatividad.