El BBVA pone en funcionamiento el cajero automático de Rasquera después de la protesta vecinal
La entidad bancaria ha instalado provisionalmente un módem 4G para cubrir el tráfico telemático de datos mientras no se mejora la línea telefónica
El BBVA ha puesto finalmente en funcionamiento el cajero automático de la población de Rasquera, en la Ribera d'Ebre, después de la protesta vecinal de este miércoles al mediodía. Técnicos enviados por la entidad bancaria han instalado este jueves por la mañana un módem 4G para que el aparato pueda operar provisionalmente. Fuentes del BBVA se han escudado en los problemas de servicio de las operadoras de telecomunicaciones a través de la red telefónica convencional para justificar que el único cajero del pueblo haya estado más de tres meses sin funcionar.
Aducen que los nuevos modelos de cajero implantados después de la compra de CatalunyaCaixa por parte del banco, teóricamente con mayores prestaciones y operatividad, requieren un ancho de banda mayor. Pero a pesar de haber reclamado hace tiempo una solución a esta insuficiente capacidad de la línea telefónica, aseguran que la compañía todavía no les ha ofrecido ninguna solución. A pesar de todo, el consistorio ha celebrado la noticia de la puesta en marcha pero, al mismo tiempo, considera que la entidad tendría que hacer llegar una disculpa a los afectados.
Los vecinos de Rasquera no son los únicos que sufren constantes problemas con el servicio de los nuevos cajeros automáticos del BBVA. En otros municipios de las Terres de l'Ebre las averías son frecuentes y pueden dejar el aparato inoperativo durante varios días. Eso perjudica especialmente los pueblos más pequeños, que tienen en estos cajeros los únicos servicios bancarios de proximidad, especialmente a raíz del desmantelamiento de las oficinas con atención personal.