Desmantelan una banda establecida en Gandesa que robaba cajeros después de hacerles explotar
La organización criminal está acusada de robar más de 100.000 euros
Los Mossos D'Esquadra han desarticulado un grupo criminal especializado en robar cajeros automáticos y cajas de tráfico de entidades bancarias haciéndoles explotar con mezclas de gases inflamables. La banda, establecida en una finca rural de Gandesa y en varios pisos de Barcelona, está acusada de sustraer por este sistema más de 100.000 euros.
Según ha informado la policía autonómica, se ha procedido a la detención de cuatro personas a las cuales se considera las autoras materiales de dos robos con fuerza en entidades bancarias, uno en l'Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) y el otro en Pals (Baix Empordà).
Los hechos se remontan a la madrugada del 10 de marzo del 2017 cuando presuntamente los cuatro hombres hicieron explotar una caja de tráfico de una entidad bancaria en la Rambla Marina de l'Hospitalet de Llobregat.
Varios vecinos se despertaron sobresaltados a causa de la potente explosión que desplazó la puerta blindada de la caja, de unos 100 kilogramos de peso, más de 30 metros. Los ladrones consiguieron llevarse más de 70.000 euros en metálico del banco.
El segundo robo lo cometieron presuntamente el 14 de mayo por la tarde en la localidad de Pals. Esta vez hicieron explotar un cajero automático y consiguieron llevarse 27.000 euros.
La investigación ha permitido identificar a los integrantes de este grupo, además de acreditar que hacían tareas de preparación previas antes de cometer los robos: estudiaban los movimientos del dinero y las medidas de seguridad y de esta manera preparaban la mejor estrategia para conseguir un botín sustancioso, ha informado a los Mossos.
Los policías también constataron que el líder del grupo ya había sido detenido dos veces por hechos de la misma naturaleza: en una ocasión el año 2013, como presunto autor del robo con fuerza de once cajeros automáticos, y el año 2015 cuando se le relacionó con cinco robos, en uno de los cuales quedó herido de gravedad mientras manipulaba el material explosivo.
El pasado 13 de junio se estableció un dispositivo para detener a los autores y realizar las entradas y cacheos en sus domicilios ubicados en la ciudad de Barcelona y en una finca rural de Gandesa (Terra Alta).
Los agentes recuperaron aparatos electrónicos destinados a la sustracción de vehículos, elementos utilizados para la fabricación casera de artefactos explosivos, gases altamente inflamables como los utilizados para cometer las detonaciones y material electrónico relacionado con su actividad delictiva.
A los arrestados, de nacionalidad española, italiana y ecuatoriana, también se les imputan los delitos de tenencia de explosivos y daños agravados por los desperfectos provocados en las explosiones, además de los robos de varios vehículos que posteriormente utilizaban en sus acciones.
Los cuatro hombres pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de l'Hospitalet el pasado 16 de junio. El juez decretó el ingreso en la prisión para tres de los arrestados y libertad con cargos para el uno otro.