Estudiantes ebrenses de la URV denuncian que se los obliga a finalizar los estudios de magisterio musical en Tarragona

Los estudiantes de los grados de Educación Infantil y Primaria, en la especialidad de música y danza, del Campus Terres de l'Ebre de la URV se verán obligados a desplazarse a partir del próximo curso a Tarragona para finalizarlos. Así lo han denunciado este martes, después de que los responsables universitarios los comunicaran, el pasado 8 de julio, sólo diez días antes de abrir el periodo de matriculación, que la mención de música y danza se dejará de impartir en el centro a partir de este próximo curso con la única opción «alternativa» de seguir cursándolos en el campus Sescelades de Tarragona. Los afectados, que consideran la medida un «agravio» y un «menosprecio» hacia las Terres de l'Ebre, reclaman poder finalizar los estudios con las menciones que les ofreció el campus ebrense y rechazan la posibilidad de desplazarse por incompatibilidad de horarios y el elevado coste económico que los supondría.

Según han detallado en una carta-comunicado los estudiantes afectados, la dirección de la URV les ha propuesto varias opciones a modo de alternativa. Por una parte, la ya mencionada presencial, que supondría un desplazamiento dos veces por semana en Tarragona, que aseguran supone un sobrecoste próximo a los 2.000 euros anuales, aparte de la cuestión de las incompatibilidades con los horarios del Campus Terres de l'Ebre. También se ha puesto sobre la mesa la vía telemática que, consideran, «no tiene coherencia con los principios y bases de la URV» como universidad pública y presencial. También porque en el caso de la mención de música pide asignaturas prácticas como danza, formación vocal y auditiva o práctica instrumental. «Si hubiéramos optado por estudiar a distancia, habríamos escogido otra universidad». Tampoco consideran una vía intermedia entre presencial y telemática, porque no resuelve los problemas mencionados.

«Además, si tenemos en cuenta que muchos estudiantes estamos trabajando en las Terres de l'EbrE para poder costear los elevados precios de la universidad, todavía se complican más las alternativas», subrayan. Califican de «inadmisible» que se los comunicara esta poca antelación el cambio y no se los haya dado oportunidad de hablar con los responsables académicos del campus ebrense, a quien reprochan «no haber sabido dar la cara». También lamentan que desde Tarragona se les hayan dado explicaciones sobre la medida. «Creemos que no es justo y no se ha tenido en cuenta los intereses de los estudiantes», lamentan. Recuerdan, además, que en el caso del Campus del Ebre de la URV sólo se imparten el 8,9 por ciento de los grados que ofrece la universidad y que ya se ofrecen simultáneamente también en Tarragona, a pesar de representar un 24% de la población.

«Una muestra de discriminación más hacia nuestras tierras», añaden, recordando, además, que en esta zona, precisamente, la tradición musical es palabra fuerte y está muy arraigada, con un «gran potencial de alumnado» y un nivel por parte de los estudiantes «elevado». Por todo ello, consideran que la medida es un «nuevo menosprecio hacia las Terres de l'Ebre, una discriminación para nuestros estudiantes y un ataque a la esencia musical de estas tierras. Es, en definitiva, un agravio flagrante para las Terres de l'Ebre respecto del Camp de Tarragona», concluyen.