Los animalistas critican que Deltebre se gaste 60.000 euros en correbous
También alertan de que la nueva ordenanza municipal de protección animal entra en contradicción con la celebración de la fiesta
AnimaNaturalis y la plataforma Alternativa en la Fiesta Taurina en Terres de l'Ebre han denunciado que la organización de bueyes embolados o capllaçats en el municipio de Deltebre vulnera las ordenanzas del municipio aprobadas el pasado julio de 2017. La entidad animalista también denuncia la «desproporcionada» inversión municipal, de 59.840 €, para los correbous del municipio.
Al pleno de junio se aprobó el calendario de correbous para las fiestas mayores del 2017 organizadas por el CD de La Cava, fiestas del Barracot y festividad de Sant Miquel con una aportación económica similar a la del año pasado, de 59.840 €. Esta cantidad, según los colectivos animalistas, representa que los correbous acaparan gran parte del presupuesto destinado a las fiestas.
Los animalistas consideran que las fiestas están secuestradas por parte de las peñas taurinas, «creemos que las fiestas serían más enriquecedoras para todo el mundo si el presupuesto estuviera más repartido entre las diferentes actividades», explicaba Nidia Capafons, portavoz de la plataforma Alternativa en la Fiesta Taurina en Terres de l'Ebre.
AnimaNaturalis por su parte, considera la nueva ordenanza reguladora de la protección, la tenencia y la venta de animales en Deltebre como un paso adelante en la protección animal en el municipio, pero asegura que prohíbe de forma sistemática modalidades especialmente agresivas para los animales como son el bou embolado o el bou capllaçat.
Según AnimaNaturalis existen bastantes evidencias científicas que demuestran que los bueyes sufren durante estas modalidades, aunque no haya lesiones aparentes.
Durante el plenario municipal de julio, la CUP también expresó el rechazo al presupuesto para actividades taurinas. Pere Magrané y Dayana Santiago i Callau, concejala de la CUP Deltebre, denunciaban que, «es un despropósito destinar esta cantidad de dinero público a un modelo de fiesta donde , del maltrato animal se hace fiesta y se le llama tradición».