La defensa del conductor del autocar de Freginals reitera que no había pruebas de delito

El abogado del conductor del autocar investigado por el accidente de Freginals, Sergi Atienza, ha celebrado el sobreseimiento provisional de la causa contra su cliente y ha reiterado que no existían pruebas para imputarle penalmente la responsabilidad del siniestro, en el cual murieron trece estudiantes de Erasmus que volvían de las Fallas de Valencia. «Habíamos defendido desde el principio que la viabilidad del procedimiento penal no podía proceder porque no se habían acreditado los requisitos para imputar a mi cliente por imprudencia grave», ha asegurado. En este sentido, ha detallado que la investigación ya certificó que el conductor no había tomado alcohol, ni drogas y había respetado los periodos de descanso reglamentarios. «No hay ninguna prueba que apunte a una causa del accidente imputable a su persona», ha añadido. Argumenta, además, que la hipótesis de que se durmiera al volante no se puede probar.

Según el abogado, la tesis de la somnolencia habría sido abonada por los «medios» a raíz de las afirmaciones «de algunas personas que intervinieron en el accidente y mossos que de forma oficial dijeron que podía ser la causa» porque el resto de posibles factores –presencia de drogas, alcohol, tiempo de conducción o descansos- ya se habían investigado. «Remotamente quedaba la posibilidad de la somnolencia, que es una causa común de muchos accidentes. No se puede descartar pero tampoco probar. No puedo demostrar que no se durmió. Es una prueba diabólica: no se puede probar una cosa que no sucedió», ha insistido Atienza, recordando que el conductor investigado había conducido desde hace décadas vehículos de gran tonelaje y camiones, así como autocares desde hacía «24 años». «Había hecho todos los descansos, hacía sólo una hora y tres cuartos que había salido de Valencia, había sido con óptimas condiciones, en una buena zona de la ciudad sin que lo afectaran especialmente los petardos», ha cerrado.

El letrado, que criticó duramente la reapertura del caso del pasado mes de enero para, precisamente, hacer comparecer a su cliente –como único investigado- ante el juez, considera que la declaración no permitió aportar nuevos «elementos de prueba» respecto de los elementos que ya se apuntaron inicialmente. No descarta la posibilidad de nuevos recursos de la Fiscalía y las acusaciones particulares, pero cree que por los antecedentes del caso y las anteriores respuestas del juez no acabarán prosperando. En esta línea, confía en que el caso se acabará resolviendo por la vía civil, posibilitando que las familias de las trece víctimas mortales y de los 42 heridos puedan reclamar indemnizaciones por el accidente.