Laura Pinyol, autora de 'El risc més gran': «Vivir es ir haciendo equivocándose»
La novela arranca con su protagonista yendo a vivir en Prat del Comte después de un estropicio emocional
La periodista Laura Pinyol ha publicado recientemente su primera novela El risc més gran(Amsterdam), que arranca con su protagonista, Júlia, yendo a vivir en Prat del Comte (Terra Alta) con sus dos hijos después de un estropicio emocional. En declaraciones a la ACN, la autora ha destacado que la novela tiene dos temas de fondo constantes: «el miedo y la libertad, como un juego de espejos» al tiempo que ha indicado que «como más estándar y arreglada es la vida, más difícil es tomar decisiones». Los dos hijos pequeños de Júlia están en su vida y en la novela de una forma muy persistente. «Vivir es ir haciendo equivocándose, ir acertando prueba-error, pero hay una prueba-error que deja de ser error que es tener hijos», ha asegurado Pinyol.
La autora conoció la historia del municipio de Prat de Comte que hace unos años en época de preinscripciones hizo un llamamiento abierto para que fueran familias a vivir porque la escuela se quedaba sin ratio y a partir de 12 alumnos no era sostenible. «I cuando un pueblo se queda sin escuela, se queda sin semillas de futuro». Después sucedió lo mismo a otros pequeños pueblos y la periodista le quedó la pregunta de qué puede hacer aceptar a una persona la oferta de ir a vivir en un pueblo y marcharse. Y un día decidió que si quería hacer alguna cosa «tenía que aplicar constancia y disciplina» y empezó a dedicar sus noches a escribir la novela.
Pinyol ha explicado que El risc més grantiene como protagonista, Júlia, que ve que todo lo que ha construido a su vida no era consciente de que lo hacía y decide ir a un pequeño pueblo con los dos hijos pequeños a partir de un momento de «estropicio emocional a partir de una historia que no esperaba vivir». La novela se sitúa en Prat del Comte, pero esta no tiene tanto que ver con lo que le pasa allí, sino con todo «lo qué aprovecha para arreglar mientras está allí». En esta estancia, la protagonista arregla «los recuerdos de la madre, la relación con el padre, con su hermanastro, sus hijos...».
La periodista tenía muy claro que la protagonista tenía este perfil de mujer, relativamente joven, con hijos muy pequeños, con un padre que había hecho de padre y de madre, con un hermano adorable más pequeño con los convenientes que supone, con una ex-pareja muy presente; un marido, ausente y como todo eso acaba «condicionando» todo lo que le pasa.
Los hijos de Júlia están en su vida y en la novela de una forma muy persistente. «Vivir es ir haciendo equivocándose, ir acertando prueba-error, pero hay una prueba-error que deja de ser error que es tener hijos». Según Pinyol, «todo es provisional, en la mayoría de los casos, hasta que tienes hijos, ya que aquella relación con ellos es incondicional y de por vida, todo puede cambiar pero aquello es uno irreversible que siempre te acompaña». De hecho, ha considerado que los dos hijos de la protagonista la conectan con la tierra.
El miedo y la libertad
La novela, como ha explicado su autora, tiene dos temas de fondo constantes: «el miedo y la libertad, como un juego de espejos». Pinyol cree que «detrás de una decisión o un cambio siempre hay cierto miedo y eso es muy pragmático y fácil disfrazarlo de responsabilidad. Nosotros decimos responsabilidades de las cosas que funcionan como un yugo y te parece que es lo que toca». La autora ha señalado que este juego de espejos entre el miedo y la libertad se puede aplicar al resto de personajes porque todos ellos en «un momento hacen este tanteo entre aquello que se los hace más miedo y aquello que les hace vivir más».
Primera novela
Esta es la primera novela de Laura Pinyol y, como ha explicado, su experiencia con la literatura no va más allá del punto de vista de lector. Uno de sus grandes temores era si gustaría a alguien y tenía los estándares necesarios. «Es una sensación de desnudarse de una forma muy pública y es un exhibicionismo de intimidad. Me solté en el proceso de escritura y como lo hacía con nocturnidad y alevosía, no me tenía que justificar delante de nadie». Mientras iba escribiendo, su propio relato la atrapó y si no le dedicaba tiempo, «le hervía la sangre».
La escritora no tiene ninguna otra novela entre manos. De momento, como ha precisado, quiere vivir la publicación de El risc més gran con «tranquilidad y gratitud porque es una experiencia que no contaba vivir. No entraba en mis planes y es fabuloso porque te permite reencontrarte con gente que hacía tiempo que no veías».
Trayectoria
Laura Pinyol Puig (Terraza, 1979) es periodista y esta es su novela de debut. Especializada en comunicación, también colabora en varios medios escritos, como el diario Ara, especialmente en el suplemento Ara Criatures , Nació Digital i Descobrir, además de dirigir una agencia de comunicación.