Batea reaviva la queja por la supuesta «discriminación política», a raíz de la disputa por los límites del término con Gandesa

El Ayuntamiento de Batea vuelve a denunciar la supuesta «discriminación política» que ya llevó al alcalde Joaquim Paladella, el pasado verano, a amenazar al marcharse de Cataluña para formar parte de Aragón. Ahora las acusaciones se dirigen sobre todo al presidente del Consejo Comarcal de la Terra Alta, y alcalde del municipio vecino de Gandesa, Carles Luz. Gandesa ha abierto una disputa para aclarar una «disfunción» de los límites del término municipal y Batea critica que les quieran «segregar» una parte que es suya. En una moción, aprobada el pasado 26 de marzo, con los votos a favor del equipo de gobierno de UPTA y la abstención del concejal del PDeCAT, se exige a los concejales de los partidos de la oposición - uno del PDeCAT y tres de 100% Batea- que «tomen las medidas necesarias» y revisen los «acuerdos, pactos y votos» que mantienen en favor de la presidencia comarcal de Luz, y a fin de que el alcalde de Gandesa «no se aproveche del cargo en contra de los intereses de los bateans».

El Ayuntamiento de Batea vuelve a reavivar la polémica por la supuesta «discriminación» que estaría sufriendo el municipio. A raíz de la disputa poruna disfunción de los límites del término municipal que hace meses que se inició con Gandesa, Batea contraataca con el argumento de ser víctimas de políticas «de hostilidad» y «discriminación» por algunos asuntos no resueltos, como las plazas públicas de la residencia de abuelos municipal o los nuevos parques eólicos. Joaquim Paladella ha insistido en que la amenaza de marcharse a Aragón, amenaza polémica y mediática que hizo al mismo alcalde bateà a la Generalitat el pasado verano, sólo pretendía ser un toque de atención, una manera de decir «que ya era suficiente», pero ahora vuelve a la carga.

Paladella ha recriminado al alcalde de Gandesa y presidente del Consejo Comarcal de la Terra Alta, Carles Luz, que intentara conseguir votos en las últimas elecciones municipales prometiendo «más contundencia contra Batea». Este es el punto de partida de una moción presentada por el grupo municipal de Paladella, la UPTA (Unió per la Terra Alta), donde denuncian «acuerdos políticos contrarios a los intereses de Batea». Los cinco concejales del equipo de gobierno votaron a favor, el concejal del PDeCAT se abstuvo y los tres concejales de 100% Batea votaron en contra.

La moción denuncia «claras decisiones y actuaciones políticas» discriminatorias y pone como ejemplo «la denegación, con informes falsos, de las plazas de la residencia o los intentos por tomar al municipio una parte de aquello que es y ha sido siempre su término municipal». También se acusa Carles Luz de no tener «lealtad institucional» ni hacer políticas de «buena vecindad» y se califica el informe técnico que ha elaborado la Diputación de Tarragona sobre la cuestión, como un «informe de parte». Finalmente se asegura de que ha habido «presiones políticas» sobre algunos de los funcionarios del Ayuntamiento de Batea.

La moción pide a los concejales de la oposición que trabajen para los «intereses» del municipio. «No puede ser que le den apoyo y utilice el cargo que tiene con los votos de los concejales de Batea para ir en contra de Batea», ha defendido Paladella.

Por su parte, el alcalde de Gandesa y presidente del Consejo Comarcal de la Terra Alta ha declinado hacer ninguna valoración de la moción y no ha querido entrar en la polémica.

Para resolver la cuestión de los límites del término municipal, se ha creado una comisión que ya se ha reunido con los responsables del Ayuntamiento de Gandesa y que tiene previsto reunirse con el Ayuntamiento de Batea en el mes de mayo. A partir de estos encuentros y de la aportación de informes jurídicos y técnicos se acreditará cuál tiene que ser el límite del término definitivo.