El Ayuntamiento de Amposta destinará 170.000 euros a limpiar y restaurar un nuevo tramo de la fachada fluvial

El Ayuntamiento de Amposta prevé invertir 170.000 euros en la segunda fase de recuperación de la fachada fluvial de la ciudad. Después de finalizar las obras de restauración del arco gótico a finales del año pasado, la primera actuación de recuperación del espacio, el gobierno municipal ha presentado su continuación. Se trata del proyecto de «regeneración ambiental» y «puesta en valor» de la fachada fluvial en el tramo que va entre Poador y el segundo foso del castillo. Con un plazo de ejecución de cuatro meses, entre las actuaciones previstas figuran la limpieza y erradicación de vegetación que afectan la imagen y la conservación de los bienes patrimoniales; la eliminación o sustitución de elementos constructivos discordantes con el conjunto; reparar elementos arquitectónicos o implantar iluminación ornamental a todo el conjunto. «Nos servirá también para recuperar la vida y la vista de la ciudad hacia el río Ebro», ha declarado el alcalde, Adam Tomàs.

Concretamente, el proyecto plantea eliminar las malas hierbas que a causa del mantenimiento inexistente han ido proliferando de forma considerable en la mayoría de muros y rincones de la fachada, sobre todo higueras y arbustos. También se actuará sobre cornisas y salientes arquitectónicos que contribuyen al aspecto de degradación del espacio. Adicionalmente, se trabajará para minimizar el impacto negativo de algunos elementos o soluciones constructivas considerados como discordantes. Con este objetivo, se planea rebozar algunos recrecidos con después de calidad baja, desmontar un balcón en estado precario o derribar el coronamiento de hormigón que remata el muro que delimita la terraza del mirador de la calle Victòria.

En el ámbito de las actuaciones para revalorizar los elementos patrimoniales destacan la limpieza y reparación de menajes de fábrica de masonería o sillares. Se restaurarán elementos singulares como el arco de pavos del pasaje de la calle victoria o las escaleras que antiguamente permitían acceder al río. La actuación principal, sin embargo, se centrará en la restauración del edificio histórico situado sobre la «hipotética» cueva y ruinas de Santa Susanna, además de los restos arqueológicos del entorno. También se limpiará y consolidará el elemento constructivo que se adentra en el río en la parte posterior de una finca de la calle Victòria con el objetivo de dejar las bases para instalar un futuro mirador.

«En el territorio hay pocas fachadas fluviales urbanas como esta. Sólo hay cuatro y nosotros tenemos la suerte de tener una. Ahora lo tengo que recuperar», ha subrayado el alcalde, recordando que el gobierno municipal, de forma paralela, trabaja también en el plan director de la fachada fluvial, que es mucho más ambicioso y configurará «lo que queremos que sea nuestra ciudad».