La PDE urge a formar Gobierno para defender el caudal ambiental del río
El movimiento antitrasvase celebrará el próximo 12 de mayo la decimosexta asamblea general sin, de momento, previsión de convocar grandes movilizaciones
La Plataforma en Defensa del Ebro (PDE) urge a formar Gobierno para poder disponer de forma inminente de un interlocutor y un aliado institucional a la hora de defender el caudal ambiental del tramo final del río. El movimiento social, que ya avisó hace unos meses de que el ejecutivo del PP estaba aprovechando el conflicto en Cataluña para negociar en el resto del Estado español un Pacto Nacional del Agua que podría incluir un trasvase del Ebro, considera que la aplicación del 155 está debilitando no sólo las instituciones catalanas sino que también puede condicionar seriamente la defensa del río. Este será uno de los ejes centrales que se pondrán a debate a la próxima asamblea general de la PDE, la decimosexta, que tendrá lugar el próximo sábado, 12 de mayo, a las ocho de la noche en Tortosa. A pesar de la complejidad del escenario que dibujan, el movimiento antintransvasament no llevará a la asamblea la convocatoria inminente de grandes movilizaciones.
Las consecuencias de la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española se han hecho patentes en la lucha para defender el caudal ambiental del río Ebro. «Institucionalmente no lo defensa nadie», ha remarcado el portavoz de la PDE, Manolo Tomàs, apuntando que la Generalitat no ha podido enviar a ningún conseller ni representante «al máximo nivel» en las reuniones organizadas por el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente para abordar el Pacto Nacional del Agua. Un síntoma que denota «cierta debilidad», ante las maniobras en busca de un «consenso» por parte del gobierno español en el resto del Estado sobre la idea de una supuesta «gestión solidaria» del agua a partir de los «excedentes» que se le atribuyen en el Ebro. Un planteamiento que «sólo está siendo contrarrestado por Aragón: Cataluña no puede».
«Es conveniente que se forme Gobierno. Quizás después discutiremos con él, por los canales y el regadío, pero para el Plan Hidrológico y defender el caudal nos iría muy bien», asume Tomàs, consciente de que la lucha de la PDE, fuera del ámbito de las Terres de l'Ebre, es percibida a menudo como «contradictoria». La formación de un Gobierno, con respecto a cuestiones relacionadas con la política de aguas, resulta también esencial para la PDE en el sentido de poder contar con un «interlocutor» institucional para abordar y negociar varios aspectos, según ha apuntado el también portavoz del movimiento antitrasvase Joan Antoni Panisello.
Doble análisis
Este escenario será uno de los puntos centrales que tendrá que discutir la asamblea general del próximo día 12. Especialmente, ante el análisis dual que se abre ante la situación política actual dentro del amplio frente, que en el ámbito ibérico, se ha organizado para hacer frente a las pretensiones del gobierno del PP y sus regantes aliados en materia hidrológica. Así, la PDE es de la opinión de que el ejecutivo español podría aprovechar la proximidad de las elecciones autonómicas y municipales del próximo año para apretar el acelerador de las negociaciones y aprobar un Pacto Nacional del Agua que abriría, nuevamente, la vía a posibles nuevos trasvases. Otros, por el contrario, consideran que los conservadores al poder intentarían aprovechar esta misma coyuntura para crear voto cautivo, pero sin poder concretar un proyecto en esta línea.
En cualquiera de los casos, la PDE llegará a la decimosexta asamblea sin ninguna propuesta concreta de movilizaciones de gran formato en un horizonte próximo. Continúan todavía esperando la sentencia del Tribunal Supremo sobre el contencioso administrativo presentado en contra del Plan Hidrológico de la Conca de l'Ebre, inicialmente prevista para el pasado mes de diciembre. «No es un mal síntoma que se retrase», ha meditado Tomàs. La asamblea, que contará con la participación de líderes históricos contra el trasvase como Santiago Martín Barajas –representante de Ecologistas en acción en el Consejo Nacional del Agua-, también informará sobre la necesidad de una mayor aportación de sedimentos en el tramo final del río y al Delta, a raíz de los beneficios que suponen avenidas como la de las últimas semanas –«haría falta que bajaran más veces al año: son una pequeña parte de lo que se necesita», ha precisado Panisello-. También se informará sobre la situación de la queja en Europa, los movimientos para revertir el trasvase desde el pantano del Siurana y los posibles actos de celebración del decimoctavo aniversario de la PDE, el próximo septiembre.