La obra 'Recoger Sonidos' de Matteo Guidi gana la 15ª Bienal de Artes Ciudad de Amposta

La obra ‘Recoger sonidos’, del italiano Matteo Guidi, ha ganado la decimoquinta edición de la Bienal de Arte Ciudad de Amposta (BIAM), impulsada por Lo Pati - Centro de Artes Tierras del Ebro y dirigidas por el artista ampostí Manel Margalef. El ganador se hizo público este sábado durante el acto de inauguración de la exposición de la BIAM. El jurado del premio, que lo ha distinguido por|para la «calidad» de la obra y la «sensibilidad social que se desprende», ha reconocido que ha sido una «elección difícil». El certamen ha contado con diecisiete proyectos seleccionados. La exposición se podrá visitar en Lo Pati hasta el próximo 29 de julio.

La obra es una pieza sonora fruto de un taller del mismo Guidi en el centro penitenciario Brians I para mujeres. Según explican desde la organización del certamen, a diferencia de otros países el sistema penitenciario español prohíbe a las reclusas cocinar en las celdas. Eso, remarcan, las aleja de sonidos tan habituales de la vida cotidiana como batir un huevo, freír patatas o abrir una botella. Por este motivo, el artista planteó a las tomas|presas recrear estos sonidos con objetos presentes en la prisión y acompaña el audio con diapositivas del material utilizado.

En la inauguración de la BIAM, el ganador dedicó el premio a una de las reclusas que participó al proyecto, pero que no lo ha podido ver acabado porque apareció muerta a su celda.

Entre los artistas seleccionados se encuentran Abel Jaramillo, Amaia Molinet, Ana H. del Amo, Antonia del Río, Elena Aitzkoa, Lluc Baños, Lúa Coderch, Lola Lasurt, Laura Llaneli, David Mutiloa, Francisco Navarrete, Diego Paonesa, Mònica Planes, Mario Santamaría y Carlos Valverde, con obras que desde diferentes disciplinas y formados reflexionan sobre la reubicación de aquello analógico en el mundo digital, la memoria histórica o el propio concepto de habitar y re-formular el espacio.

Autoridades y artistas han resaltado la importante trayectoria de la BIAM, una de las más veteranas del país, que durante prácticamente tres décadas de existencia se ha consolidado como un verdadero termostato de la creación contemporánea, tanto con respecto a los artistas emergentes como otros más consolidados.