Diari Més

Un informe internacional pone el Castor como ejemplo de fracaso de la colaboración púbico-privada

El estudio analiza diez proyectos que han sido impulsados con financiación pública y han acabado generando impactos sociales y económicos negativos

Plataforma marítima del proyecto Castor, delante de la costa del Sénia. Imagen de archivo.

El Observatorio de la Deuda de la Globalización recorrerá el archivo de la querella del Castor contra exministros y empresarioACN

Publicado por

Creado:

Actualizado:

El proyecto Castor como uno de los principales ejemplos mundiales del «fracaso» de la alianza entre sector público y capital privado. Escrito por expertos internacionales de entdades sociales como el Observatorio de la Deuda en la Globalización (ODG), La historia se repite: como fracasan las asociaciones público-privadas, expone los impactos negativos de un modelo, basado en la financiación pública, que «con demasiada frecuencia causa miseria a las comunidades locales, además de verse rodeadas en casos de connivencia política-corporativa». Lo hace analizando diferentes proyectos de Colombia, Francia, India, Indonesia, Lesoto, Liberia, Perú, el Estado español y Suecia en equipamientos e infraestructuras relacionadas con la enseñanza, la salud, el agua y el saneamiento, la energía y las infraestructuras.

Tres de los casos analizados recibieron financiación, de forma indirecta o directa, por parte del BEI, institución financiera pública de la Unión Europea. El informe destaca, en este ámbito, el proyecto Castor, que tuvo que ser paralizado por las «fallas evidentes, incluida la debida diligencia de identificar los posibles impactos del proyecto». Después de generar más de 1.000 terremotos durante las pruebas de inyección, el almacén de gas submarino nunca ha sido utilizado pero puede llegar costando en el erario público más de 3.300 millones de euros, que tenían que asumir los usuarios a través de la factura del gas. A pesar de eso, el BEI no ha reconocido abiertamente las responsabilidades por el fiasco ante de las críticas del Parlamento Europeo y de las entidades que cuestionaron el proyecto. Un caso similar, también financiado con fondo de la entidad comunitaria, tuvo lugar en Suecia, con la construcción del hospital Nya Karolinska Solna. Con un coste que se disparó de los 1.400 a los 2.400 millones de euros, el equipamiento se vio afectado por graves fallos técnicos y todavía no ha entrado en pleno funcionamiento. Se lo conoce como «el hospital más caro del mundo».

El informe concluye que, a pesar de tratarse de un tipo de alianza que resulta «caro, arriesgado y opaco», los bancos multilaterales de desarrollo, como el Grupo del Banco Mundial (WBG) y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) han tenido un papel destacado en el asesoramiento y financiación de este tipo de proyectos en diferentes sectores. Los diez casos estudiados, tanto en economías de países desarrollados como subdesarrollados, tienen en común que tuvieron un alto coste para las administraciones públicas y un nivel de de riesgo excesivo para el sector público, suponiendo una «pesada carga» para los ciudadanos. Además, en nuevo de los diez casos no hubo transparencia en el proceso ni se consultaron las comunidades afectadas; cinco tuvieron impactos negativos sobre la población pobre, contribuyendo a incrementar la división social; y tres generaron impactos sociales y ambientales.

tracking