Localizan más de 2.500 plantas de marihuana en un barranco de los Ports de Tortosa

Los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Tortosa, han desmantelado una extensa plantación de marihuana compuesta por más de 2.500 plantas, la cual se encontraba en un lugar de difícil acceso próximo al Barranc de la Vall de la Figuera del parque natural dels Ports en Tortosa.

El cultivo se había establecido en antiguos bancales que habían sido abandonados a lo largo del tiempo. La plantación estaba dotada de un sistema de riego automático y protegida de las personas y animales por un cercado de alambre de espino. Sus cuidadores vivían en pésimas condiciones dentro de un habitáculo insalubre construido en una zona estratégica donde se situaba la plantación principal, desde la cual se controlaban todos los accesos a la zona.

A principios del mes de octubre, agentes del Seprona, que se encontraban haciendo tareas de vigilancia en torno al parque natural de los Ports, detectaron la instalación de una conducción para extraer agua de manera ilegal, desconociendo cuál era el destino de esta. La zona donde se encuentra va la plantación estaba deshabitada y necesitada de instalaciones agropecuarias próximas.

Después de un arduo trabajo de busca, en un paraje despoblado de difícil acceso situado entre las montañas, se localizó una infraestructura que proveía en exclusiva diferentes bancales que se habían acondicionado para albergar plantaciones de cannabis. Una vez allí, los agentes descubrieron numerosas plantas de marihuana en fase adulta, las cuales se encontraban en la mitad del proceso de recolección. El cuerpo no pudo hacer una observación directa de la plantación a causa de la orografía del terreno. Se desconoce quienes serían los responsables del cultivo y se cree que estos habrían sido alertados de la presencia policial.

A causa de la complejidad y magnitud del paraje, el día 4 de octubre se estableció un dispositivo policial formado por más de 25 guardias civiles con el fin de dar seguridad a la actuación, identificar y comprobar la magnitud de la plantación. En total, se contabilizaron 2.542 plantas de marihuana y se descubrieron varios habitáculos donde vivían, secaban las plantas y preparaban la infraestructura para desarrollar la actividad ilegal. Desde el enclave escogido se podía controlar todos los movimientos que había en la zona.

Una vez desmantelada la plantación y a causa del grande numero que había, fue necesario el ingenio de los agentes, teniendo que desplazar más de 400 kilos de marihuana por una zona boscosa de difícil acceso y sin medios de locomoción.

En el operativo han participado agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Tortosa y del Servicio de Investigación Fiscal de la Guardia Civil de Tarragona.