El arbitraje resuelve que FCC cumplió con el contrato de limpieza del pantano de Flix
La constructora reclamará los 60 MEUR del sobrecoste de los trabajos a Acuamed
El laudo arbitral, que se ha llevado a cabo en la Corte de Arbitraje de Madrid, ha resuelto que FCC (Fomento de Construcciones y Contratas) cumplió «correctamente con sus obligaciones contractuales» en los trabajos de descontaminación del embalse de Flix y que siguió las instrucciones de la dirección de obra designada por Acuamed. La Corte condena a la empresa estatal a pagar casi 1,8 millones de euros por los perjuicios ocasionados en este proceso de rescisión de contrato, pero FCC le reclamará 60 millones de euros más por el sobrecoste que tuvo la actuación. El laudo también resuelve que el contrato con la constructora no preveía la depuración de las aguas confinadas en el pantano. Acuamed ha asegurado al Ayuntamiento de Flix que la decisión del arbitraje no afecta a la reanudación de los trabajos de descontaminación que quedan pendiente.
Según un comunicado de FCC, el laudo arbitral «ratifica el correcto cumplimiento de las obligaciones contractuales de dragado y descontaminación de el lecho del embalse» por parte de la UTE Ebro-Flix y que «ha quedado probado que el pantano» había sido «descontaminado», a pesar de los peritajes del Ciemat (Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas) que determinaron que faltan cerca de 80.000 metros cúbicos de lodos tóxicos para retirar. FCC explica, en la nota, que el tribunal de arbitraje de la Corte de Madrid «asume las conclusiones de los informes del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas)» con que FCC defendió su cumplimiento del contrato con Acuamed. En cambio, según explica la constructora, el laudo declara probados «errores en los informes técnicos» que utilizó Acuamed posteriormente y suscribe que la depuración de las aguas confinadas en la zona a limpiar, no formaba parte del acuerdo contractual.
El arbitraje se interpuso después de que Acuamed rescindiera el contrato a FCC, en el 2017, por la negativa de la constructora a retirar los barros contaminados que todavía quedan en el fondo del pantano de Flix. El laudo condena a la empresa estatal a pagar 1,73 millones de euros a Fomento por los costes del proceso – el contrato se amplió unos meses mientras se resolvía la adjudicación de la limpieza del embalse a otra empresa. Además, con la resolución del tribunal de arbitraje, ahora es FCC quien reclamará 60 millones de euros a Acuamed por los perjuicios y sobrecoste que ha supuesto dar por acabadas las obras antes de tiempo.
Actuament es Tragsa la empresa encargada de reanudar y acabar los trabajos de descontaminación en Flix. A finales de 2017 se le adjudicaron los trabajos por 44,6 millones de euros y 19 meses de plazo. En las últimas semanas se ha instalado una nueva draga, llegada de los Países Bajos, y se están haciendo las pruebas necesarias antes de empezar.
La empresa estatal ha comunicado al Ayuntamiento de Flix que la decisión del laudo arbitral que las obras de descontaminación no se verán afectadas. «Nos han garantizado que las obras se reiniciarán en pocas semanas», ha explicado el alcalde de Flix, Marco Muro. «Desde el Ayuntamiento estamos interesados en qué se descontamine totalmente el pantano y estamos al margen de los problemas que puedan existir entre Acuamed y el anterior adjudicatario», ha añadido. «Interpretamos que el laudo habla de si se ha cumplido un contrato, pero en ningún caso de si el río está totalmente limpio y a todos nos consta que hay diferentes periciales que confirman que quedan residuos en el embalse», ha defendido.