Judicial
Las acusaciones del accidente de Freginals piden que se cierre la instrucción en el tercer aniversario del siniestro
La Audiencia de Tarragona reabrió el caso el año pasado, pero los peritajes que ordenó todavía no se han hecho
La instrucción del accidente de Freginals, donde murieron trece estudiantes de Erasmus cuando volvían de las fallas de Valencia, sigue abierta justo cuando se cumplen tres años del siniestro. Los dos sobreseimientos provisionales decretados desde el juzgado de Amposta han provocado una investigación fracturada y más larga de lo que querrían las acusaciones particulares. El caso se reabrió por tercera vez el junio pasado por la Audiencia de Tarragona, que reclamaba nuevos peritajes del vehículo y la revisión de un expediente laboral abierto al propietario del autocar, y que todavía no se han hecho. Las familias de las víctimas confían en que las diligencias concluyan en breve y deriven en un juicio por responsabilidad penal para poder empezar a cerrar la herida».
Seis meses después del accidente, en noviembre del 2016, el juzgado número 3 de Amposta archivó por primera vez el caso de Freginals, descartando tomar declaración en el conductor del autocar bajo el argumento que no había indicios de delito en su actuación. En enero de 2017, un cambio de titular en el juzgado de Amposta supuso la primera reapertura del caso, justamente para tomar declaración al chófer y corregir esta diligencia que el primer magistrado había descartado. Unas semanas después, el conductor declaró en Amposta que no había tenido conciencia de dormirse o fatigarse, pero que el vehículo se le había descontrolado. El peritaje de los Mossos d'Esquadra había acreditado que el hombre había hecho los descansos pertinentes, que no había tomado alcohol o drogas, y que tampoco se había manipulado ningún aparato tecnológico del vehículo.
Medio año más tarde, el juzgado de Amposta volvió a archivar el caso. Concluía que no existían motivos suficientes para abrir un procedimiento penal contra el conductor por 13 supuestos delitos de homicidio imprudente y 42 de lesiones imprudentes, tal como solicitaban la Fiscalía y las acusaciones particulares. El juez argumentaba que las diligencias no permitían constatar que el conductor presentara somnolencia consciente o que no hubiera respetado la necesaria cautela y pericia como profesional.
Los abogados de las víctimas y la Fiscalía presentaron recursos de reforma y subsidiarios de apelación a la Audiencia de Tarragona, que los aceptó y reabrió por tercera vez la instrucción del caso del accidente el junio pasado. El auto del ente provincial pedía revisar el expediente sancionador que la Inspección de Trabajo abrió contra el propietario del vehículo. Este expediente se había iniciado por falta de información y de formación del conductor en riesgos laborales, y por deficiencias en la vigilancia de la salud del trabajador. Los magistrados de la Audiencia requerían la documentación para considerarla «necesaria y útil» a la hora de aclarar si el chófer estaba cansado o fatigado. También reclamaban un nuevo peritaje del sistema de frenos después de que el conductor declarara que se podría haber bloqueado una rueda durante el frenazo, con el asfalto mojado.
Según fuentes judiciales, las diligencias todavía no se han hecho y, por este motivo, las acusaciones particulares se quejan de la lentitud con que se ha desarrollado la instrucción en general, que se ha alargado «más de lo deseable». Los abogados consultados por la ACN lamentan que no se haya ejecutado ninguna comisión rogatoria para tomar declaración a testigos que ya volvieron a sus países o que los informes forenses de algunos heridos no hayan llegado a los abogados hasta hace poco más de una semana. También se muestran sorprendidos por «la pasividad» con que se está investigando la responsabilidad de un accidente donde murieron trece personas y decenas resultaron heridas.
Las familias, como han informado algunos de sus abogados, confían en que la instrucción se termine en breve y que el caso derive en un juicio penal «el más bien posible», para «poder empezar a cerrar la herida» y hacer el luto.
Mientras tanto, la vía civil ha empezado a determinar responsabilidades e indemnizaciones y se han empezado a pagar «con cuenta gotas» avances de las indemnizaciones. Los abogados consultados consideran que se han hecho «las aportaciones mínimas» para cumplir con la ley de contratos de los seguros y para evitar que incrementen los intereses.