La literatura ebrense vuelve a la calle por Sant Jordi con una salud de hierro y muchos títulos nuevos
Móra d'Ebre celebra la festividad como previa de la feria del libro ebrense y con el ánimo encendido por el Premio Nacional de Cultura otorgado al Litterarum
En las Terres de l'Ebre el tiempo ha dado una tregua, este martes, con el sol que ha observado de buena mañana, para poder celebrar en las calles la festividad de Sant Jordi. El territorio vuelve a hacer valer sus escritores y poetas, con muchos estrenos para estas fechas, como los últimos títulos de Francesca Aliern o Marta Rojals, los paisajes descritos por Gerard Vergés e ilustrados por Ignasi Blanch o la recopilación de relatos de literatura negra a Assassins de l'Ebre, entre otros. La literatura ebrense llega a este Sant Jordi con una salud de hierro, impulsada y vertebrada por las ferias del libro ebrense y el Litterarum de Móra de Ebro. En la capital de la Ribera d'Ebre, las paradas, más de una veintena, se aglutinan en la plaza de Dalt.
En Móra d'Ebre, la Diada de Sant Jordi se ha convertido en una previa de la feria del libro ebrense y el Litterarum, que este año celebra el Premio Nacional de Cultura. Con los años, la repercusión de estas dos iniciativas ha ido más allá del territorio y del país y es ya uno en lo referente a los Països Catalans. «El premio lo dedicamos a toda la población y a todos los colaboradores que creyeron en este proyecto», ha apuntado al técnico de Cultura de l'Ajuntament de Móra d'Ebre, Ferran Roca.
«La feria del libro ha sido un antes y un después en el Ebro. Primero porque hemos promocionado muchísimo los autores de aquí. Ahora la gente los conoce y viene expresamente a comprar el libro que aquel año editan. Y también porque hemos marcado un camino a seguir en el mundo de la literatura», ha defendido Roca. «Lo que queremos es que el modelo de literatura ebrense pueda ser el de la literatura pirenaica u osonenca o por denominaciones de origen literarias. Sabemos que el río y su alrededor crea sinergias y complicidades que otros territorios no tienen, por la falta de este elemento tan potente, pero seguro que tienen otros que forman su literatura y la fan especial», ha defendido al librero Sergio Bassa, de laPapereria La Bassa de Móra d'Ebre.
Salud de hierro
Justamente con este impulso morenc, la literatura ebrense llega a Sant Jordi 2019 con una salud de hierro, con decenas de estrenos cada año y con escritores del Ebro que consiguen cada año ser los más vendidos en el territorio, por delante de los nombres más mediáticos de la festividad. Es el caso de Francesca Aliern, que estrena este año La jove Laura, una obra que reedita veinte años después de su primera aproximación. «El Aliern siempre nos denota la llegada de la primavera ebrense y siempre es de los libros más vendidos», apunta a Bassa. El librero constata que los títulos de escritores del Ebro o con temática ebrense se han consolidado y encabezan el ranking de ventas en el territorio Sant Jordi tras Sant Jordi. «Eso nos llena de gozo. Quizás es un libro que no se tan fácil de encontrar en otras librerías, y tenemos un buen surtido todo el año y se nota. Esperamos que este año también sea así,» ha dicho desde la Papereria La Bassa.
Entre las novedades que se pueden comprar este Sant Jordi, además de Aliern, destacan La generació #LoRiuésVida,de Àlex de la Guia y Núria Caro, sobre la lucha social de las últimas dos décadas en las Terres de l'Ebre, El riude Ignasi Blanch sobre el poema Parlo d'un riu mític i remorósde Gerard Vergés, los recoge de género negro a Asseasins de l'Ebre, El cel no és per a tothom, última obra de Marta Rojals, A passes comptades de Valer Gisbert, premio Narrativa de la Ribera d'Ebre, o El risc més gran de Laura Piñol, contextualizado en la despoblación de Prat de Comte (Terra Alta).
Sant Jordi en Móra d'Ebre
A Móra d'Ebre desde hace años, las entidades deportivas, sociales y políticas se mezclan con paradas de libros, rosas o manualidades, en la plaza de Dalt. Las librerías, como ha explicado el técnico de Cultura de l'Ajuntament de Móra d'Ebre, ceden la venta de libros a las AMPA de los colegios Santa Teresa, Lluís Vinyes y l'IES Julio Antonio, y constituyen el centro neurálgico de la plaza y las ventas.
Sant Jordi es también uno de los 192 actos de la primavera cultural que se celebra estos días en la capital de la Ribera d'Ebre, este año dedicada al escultor local Julio Antonio, cuando se cumple el centenario de su muerte. El programa cuenta con 52 colaboradores.