Sorpresa e incredulidad en la Ribera d'Ebre por la ampliación del vertedero de Tivissa

Sorpresa e incredulidad entre los alcaldes de la Ribera d'Ebre ante la magnitud del proyecto de ampliación del vertedero de Tivissa que la empresa Gestió i Recuperació de Terrenys ha planteado al Departament de Territori i Sostenibilitat. A pesar de conocer desde hace un tiempo las intenciones de la empresa en este sentido, el hecho de que las instalaciones ampliadas puedan cuadruplicar la superficie actual no ha dejado casi a nadie indiferente. «Convertirnos, de facto, en el vertedero de toda Cataluña no lo podemos tolerar», ha declarado el alcalde de la Torre de l'Espanyol, Joan Juncà. El Consell Comarcal ha informado a los ayuntamientos de la comarca sobre el inicio de la tramitación y ha encargado ya a sus servicios técnicos un informe al respecto. Un documento que serviría de base para que el ente comarcal y, posteriormente, los ayuntamientos afectados formulen sus alegaciones contra el proyecto.

«Incredulidad absoluta». Esta es la expresión que Juncà ha utilizado para definir el estado de ánimo de muchos alcaldes y vecinos de la Ribera d'Ebre ante la noticia que se han iniciado los trámites para ampliar el macrovertedero de Tivissa. Una previsión que era «vox pópuli» que llegaría, pero no con las dimensiones y condiciones planteadas: «te quedas horrorizado, son negocios poco claros y con connivencia de diferentes administraciones». «Acabamos el mandato luchando en los tribunales con una querella y un contencioso para tumbar uno –el de Riba-roja d'Ebre- y no empieza al siguiente. Ahora nos plantean la ampliación de lo que tenemos y las dimensiones. Nos hemos quedado pasmados, incrédulos y preguntándonos: ¿es una broma o que pasa? A ambos lados de la Ribera, literalmente, nos llena de mierda de lado a lado y aparte de la RE nos quieren llenar de mierda» ha añadido.

Cree que es una cuestión que va más allá de los partidos políticos y apela a la autoestima del territorio. Reclama a la Generalitat que «ahora que lo hemos cogido en el primer momento, es el momento de posicionarse a nuestro lado», dando sentido al concepto de «reequilibrio territorial». Juncà recuerda que las instalaciones de Tivissa ya fueron ampliadas para incrementar su capacidad y poder recibir residuos de toda Cataluña. «Si se tuviera que hacer una pequeña ampliación para autogestionar la basura de las tres comarcas, seguramente no encontrarían oposición en el territorio. Estamos a favor de gestionar los residuos que generamos en los pueblos», matiza.

La noticia, con el enlace a la información publicada por la Generalitat, ha llegado a los ayuntamientos del territorio desde el Consell Comarcal de la Ribera d'Ebre. Su presidenta en funciones, Gemma Carim, explica que fue en un primer momento el consistorio de Tivissa, donde se ubican las instalaciones, quien remitió el documento ambiental estratégico a la Oficina de Medio Ambiente de las Terres de l'Ebre. Se trata del informe previo a la redacción del proyecto que tiene que ser sometido a consultas de las administraciones públicas afectadas. El ente comarcal ha sido informado como titular del antiguo depósito de residuos clausurado de Tivissa y propietario de otras parcelas en la zona. «Se lo hemos comunicado para que consulten lo que se ha colgado», apunta.

Al mismo tiempo, el Consell ha encargado a su técnico que estudie la documentación presentada por la promotora del vertedero y sus argumentos –entre otros por ejemplo, la inexistencia de instalaciones similares en un radio de 150 kilómetros. A partir de aquí, tendrá que elaborar un informe que podría ser la base de las alegaciones que el ente comarcal y los municipios puedan acabar formulando en contra. «Necesitamos un informe que nos oriente», ha declarado Carim, que no se ha querido pronunciar abiertamente todavía sobre el contenido de estas alegaciones y si, finalmente, las presentarán de forma individual o conjunta con los consistorios.

«Sabíamos que en un momento u otro eso podía pasar. Cuando nosotros decíamos, con el vertedero de Riba-roja, que otro no hacía falta, teniendo residuos en Ascó y Flix, que se tienen que gestionar, y sabiendo que tendríamos que gestionar el de Tivissa. Podíamos saber que querían hacer reestructuración pero una ampliación tan grande no lo sabía nadie», sostiene la presidenta en funciones.

Reproches de Jardí al Consell Comarcal

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Tivissa, su alcalde en funciones, Jordi Jardí, que dejará el cargo la próxima semana, ha evitado valorar directamente el proyecto con el argumento que se trata de una iniciativa impulsada por una empresa privada, cuya tramitación corresponde a la Agència de Residus de Catalunya. Con todo, Jardí considera «sorprendente» que el Consell Comarcal de la Ribera de Ebro haya notificado «a todos los ayuntamientos excepto al de Tivissa» para que puedan cursar las alegaciones. «Como municipio más afectado esperábamos recibir esta comunicación porque desde el Ayuntamiento hacemos las alegaciones que consideramos», ha reprochado.

En este sentido, valora que la aparición de la noticia y el hecho de no haber recibido la comunicación del ente comarcal «no es nada más que otra maniobra de una serie de gente que va en contra de la creación de bien público, que es velar por sus intereses personales, y poco los importa ensuciar el nombre de personas y municipios que durante los últimos años hacemos las cosas muy bien hechas», ha cerrado.