Incendios
Más de 200 personas participan en la marcha y carrera en memoria a los bomberos muertos de Horta de Sant Joan
Los participantes pasan por la zona cero
Más de 200 personas han participado este domingo por la mañana de la marcha y la carrera en recuerdo de los cinco bomberos de los GRAF de Lleida cuando, este domingo, se cumple una década de la tragedia. Una setentena de participantes han recorrido unos 14 kilómetros corriendo mientras que unos noventa lo hacen caminante. Todos ellos han salido de la zona de la Harinera y pasarán por la zona del atrapament. Uno de los vecinos de Horta, Jaume Chertó, ha explicado que cada vez que caza por la zona sigue oyendo|sintiendo la «impotencia» de aquel momento que fue «muy duro».
Los participantes han recogido los dorsales en el descampado de la Harinera, dónde hace diez años se estableció el centro operativo del incendio. Tocadas las ocho de la mañana y después de recoger los dorsales y recibir las instrucciones para participar en las dos actividades deportivas, las más de 200 personas han empezado a correr y andar|caminar por la zona de los Puertos que se quemó hace diez años. Jordi Vendrell, miembro de la Fundación Pau Costa y organizador de este homenaje, ha afirmado que aquello que hace «especial» esta marcha es recordar a los compañeros que murieron en la tragedia. «Justamente, hoy hace diez años, tanto la marcha como la carrera pasan por los rincones claves de aquel incendio», ha dicho.
Entre los participantes, está Jaume Chertó, un vecino de toda la vida del municipio hortelano, que ha explicado que uno de sus hijos y su yerno trabajaron en el fuego como bomberos. «Es una pena que hemos llevado muchos años dentro porque lo vivimos muy intensamente», ha rememorado. «Cuando oí que había habido un accidente se me giró todo. Todavía lo tenemos girado y es una forma de demostrar lo que sentimos en aquel momento y aquello que sentimos ahora es participar. Haremos el que podremos», ha dicho emocionado.
De hecho, este vecino, que es cazador, ha asegurado que cada vez que se dirige por la zona afectada por el incendio, oye|siente la impotencia de recordar cómo las llamas lo arrasaron. «El fuerte fue cuando nos dijeron que había atrapados, un amigo de mi hijo murió, fue muy duro», ha lamentado.