Política Municipal
Amposta cambiará el Reglamento Orgánico Municipal para evitar «faltas de respeto y gritos» en los plenos
El plenario votará también una modificación presupuestaria para hacer inversiones de mejora del alumbrado de varias calles
En el pleno ordinario de julio, de este lunes por la noche, el Ayuntamiento de Amposta limitará a través del Reglamento Orgánico Municipal (ROM) los tiempos de exposición, réplica y contrarréplica de los puntos del orden del día de las sesiones plenarias municipales. El alcalde Adam Tomàs defiende que se quieren evitar situaciones «del mandato anterior» donde hubo «insultos, gritos y faltas de respeto al equipo de gobierno y otros miembros de la oposición». Excepto en los plenos de presupuestos, se limitará el tiempo de exposición a seis minutos, las intervenciones de los portavoces municipales a tres minutos, y los turnos de réplica a dos minutos. El plenario de julio también prevé una modificación presupuestaria para hacer varias inversiones en alumbrado y alcantarillado y para recuperar la celoquia del Castell.
La modificación del ROM prevé una limitación de máximo de seis minutos para la exposición del punto del orden del día o la moción. En el caso de los plenarios de presupuestos será de veinte minutos. También se regulan las intervenciones de cada portavoz a un máximo de tres minutos (en los plenos de presupuestos será de diez minutos) y tendrán dos minutos para el segundo turno de réplica de cada grupo municipal. Los ponentes que hayan hecho la exposición del punto del orden del día podrán intervenir al final de cada turno de palabra, con una duración máxima de cuatro minutos en el primer turno, tres minutos en el según turno – en la aprobación de los presupuestos municipales, la primera intervención final puede ser de once minutos y la segunda de seis minutos.
Sólo el presidente del pleno podrá conceder un turno de alusiones que no excederá en ningún caso al minuto por cada grupo municipal o concejal/a no adscrito/a aludido. Para Tomàs es una norma que quiere «garantizar el respeto que la institución merece». El alcalde de Amposta se ha ofrecido a retirar la modificación del ROM del orden del día «si hay un compromiso de comportamiento ético y respetuoso por parte de todos los grupos municipales, permiten que cada uno defienda sus ideas pero siempre desde el respeto».
Otro de los puntos del orden del día es la modificación del presupuesto número 23, de cerca de 2,5 millones de euros. El 70% de esta cantidad se destinará a mejorar el alumbrado de tres calles y avenidas - con 515.000 euros- y a recuperar la celoquia del Castell –con 600.000 euros-, actuación por la que también se cuenta con una subvención del 1,5% Cultural del gobierno español.
También se prevé destinar 48.500 euros para sustituir la red de pluviales en la calle Palau i Quer, 48.500 euros para sustituir el alcantarillado de la calle Dos de Maig o 48.500 euros más para el alcantarillado de otras calles del municipio. Se invertirán 78.500 euros en mejora de caminos, 105.000 euros para la conservación del edificio de la piscina municipal, 48.500 para la repavimentación de diferentes vías públicas, 16.800 euros para adquirir vehículos para la Brigada Municipal, o 45.000 euros para el soterramiento de las líneas eléctricas.
Completan las propuestas dos partidas de 50.000 y 110.000 euros para el transporte adaptado y el servicio de atención domiciliaria, respectivamente.
El pleno de julio también llevará a aprobación el plano económico y financiero 2019-2020, requisito exigido al consistorio ampostí por haber roto la regla del gasto en el presupuesto del 2018. El Ayuntamiento de Amposta tenía un endeudamiento del 40% pero medio millón de euros de ahorro neto y 5 millones de euros de remanente que han destinado a inversiones. «El plan pide contener las inversiones y no tocar el remanente de tesorería pero lo que no haremos será tener seis millones de euros de remanente en el cajón, inmovilizados sin hacer nada», ha defendido Tomàs.