Unos 40 vehículos hacen una marcha lenta para exigir ayudas directas para los afectados por el incendio de la Ribera d'Ebre

Unos ochenta de campesinos afectados por el incendio de la Ribera d'Ebre, el Segrià y las Garrigues han salido pasadas las nueve de la mañana en marcha lenta con una cuarentena de vehículos desde Torrefarrera (Segrià) para dirigirse por la A-2 hasta la sede del Departament d'Agricultura, en Barcelona. Consideran «insuficientes» las medidas de apoyo aprobadas por la conselleria y, por eso, siguen exigiendo la habilitación de ayudas directas a fondo perdido para los campesinos y ganaderos afectados con el fin de paliar los daños que les ocasionó el fuego en sus explotaciones. Los participantes prevén llegar a la capital catalana hacia el mediodía donde esperan ser recibidos por la consellera Teresa Jordà con el fin de poder trasladarle sus reivindicaciones.

Los campesinos afectados por el incendio quieren exigir al Govern que habilite ayudas directas a fondo perdido con el fin de poder restituir los daños que han sufrido sus explotaciones como consecuencia del fuego y recuerdan que así se comprometió, según el presidente de Asaja Lleida, Pere Roqué. De las 5.046 hectáreas quemadas entre las comarcas de la Ribera d'Ebre, el Segrià y las Garrigues, 953 corresponden a terrenos agrícolas y 4.071 son forestales.

«Nos quieren ayudar replantando los bosques o cortando los pinos quemados y de eso el campesino no puede percibir nada y, en cambio, tenemos que ir a buscar créditos blandos, pero se tienen que devolver», ha lamentado Ramon Guiu, campesino de Bovera. «Quizás dentro de cinco años cuando volvamos a producir no tendremos ni para devolver los créditos porque la gente se hace mayor», ha señalado. Antonio, campesino de Flix, ha explicado que en su finca «se ha quemado todo, 30 hectáreas de olivos y almendros, además de mangueras y tubos», y «tenemos que seguir pagando el riego». «Pedimos al banco para comprar dos fincas y lo tenemos que seguir pagando y ahora se ha parado todo», ha expuesto.

Hay que recordar que Agricultura puso en marcha un plan de apoyo a los afectados que prevé destinar 5 millones de euros a una línea de préstamos blandos, cuyos intereses asume el Govern. Otro bloque de medidas plantea intervenciones estratégicas en infraestructuras básicas para prevenir los incendios forestales como la limpieza y el acondicionamiento de caminos; el establecimiento de franjas de protección y puntos de agua y la extensión de las redes de regadío en parcelas agrícolas aptas.

Los participantes en la marcha lenta se han vestido con chalecos amarillos con el lema «¿Tú los has visto? Pregunto. No. Pues yo, tampoco» acompañadas por crespones negros. Los campesinos confían poder reunirse con la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, o, en todo caso, con algún responsable del departamento, con el fin de hacerle llegar sus reivindicaciones. Los afectados, sin embargo, ya han anunciado que si no se tienen en cuenta sus demandas seguirán con las movilizaciones. De esta manera, prevén volver a cortar la C-12 en Flix este domingo, por cuarta semana consecutiva.

Los campesinos afectados se han concentrado en el área de servicio de Torrefarrera y pasadas las nueve de la mañana han salido con sus vehículos, custodiados por los Mossos d'Esquadra, para coger la A-2 y dirigirse a Barcelona. La cuarentena de vehículos se desplazan a una velocidad de unos 60 km/h ocupando un carril de la autovía, hecho que ha provocado circulación intensa coincidiendo con el paso de la caravana. La marcha lenta la ha cerrado un vehículo con un remolque que transporta un olivo quemado en el incendio con varias cruces negras colgadas.