Medio ambiente
El río Ebro a su paso por Tortosa ha llevado un 30% menos de agua que la media durante este último año
Las aportaciones entre el 1 de octubre de 2018 y el 30 de septiembre se han situado en 6.037 hectómetros cúbicos, el cuarto peor registro de los últimos 20 años
El Ebro cierra su último año hidrológico –desde el 1 de octubre de 2018 hasta este 30 de septiembre de este 2019- con un descenso de las aportaciones superior al 30% respecto de la media de los últimos 20 años. Así, según los datos hechos públicos por la Confederació Hidrogràfica de l'Ebre (CHE), la estación de aforo de Tortosa registró sólo 6.037 hectómetros cúbicos, respecto de los 8.845 hectómetros cúbicos por término medio de las últimas décadas. Se trata, de acuerdo con el organismo de cuenca, del cuarto año con menores aportaciones de este periodo, sólo por delante de 2011-2012, 2001-2002 y 2016-2017. Las precipitaciones anuales en forma de lluvia en la cuenca han sido «similares» a la media pero se han registrado menores aportaciones, hasta un 40% en la media de los últimos cinco años, por una falta total de lluvias en invierno, a los cuales se han sumado unas bajas acumulaciones de nieve los últimos años.
La CHE sostiene que, a pesar de la reducción de las aportaciones, las reservas de los embalses han permitido garantizar la campaña de regadío con «normalidad» gracias a la adopción de medidas de gestión, que no han evitado la reducción considerable de reservas en algunos sistemas.