La DO Terra Alta cierra la vendimia con menos producción pero con una uva de una calidad «excelente»
Las viñas de variedades cariñenas, las más afectadas por la ola de calor de principio de verano
La Denominación de Origen Terra Alta ha cerrado la campaña de este año con una vendimia de unos 35 millones de kilos de uva, un 5% menos que la media de los últimos años, que se sitúa en torno a los 37 millones. Según informa al Consejo Regulador, con casi el 100% de la cosecha entrada, la calidad de la vendimia «volverá a ser excelente» por las condiciones climatológicas del septiembre pasado, «con lluvias constantes y un cierzo posterior a que ha secado las plantas, impidiendo que se provocaran daños en la cosecha». Excepto este episodio, la DO subraya que el año ha estado especialmente seco y que eso explica la bajada de producción y la gran calidad del producto.
La ola de calor de final de junio y principio de julio, con temperaturas de más de 40 grados, afectó a unas 400 hectáreas de viña, especialmente de cariñenas. Las cepas, con un estado fenológico todavía débil, acusaron mucho las altas temperaturas y han dado menos kilos de uva.
De los 35 kilos vendimiados, 16 millones corresponden a las variedades negras y 19 millones en las blancas, de las cuales más de 9 millones son de garnacha blanca, la variedad más representativa de la DO.
Controles de producción
Este año se han hecho controles exhaustivos en las viñas, tanto cualitativos como cuantitativos, para asegurar el cumplimiento de los potenciales máximos admitidos para la DO Terra Alta, que son de 8.000 kilos por hectárea en las variedades negras y de 10.000 kilos por hectárea en las blancas.
El objetivo de estos controles es certificar que todo el vino que se califica como DO Terra Alta proviene de las viñas de la DO, y velar por la trazabilidad y el valor añadir de sus vinos, a la vez que se garantiza el desarrollo sostenible de la zona de producción y la supervivencia de viticultores y bodegas.