La aportación de arena en la Isla de Buda minimiza las inundaciones en los últimos temporales

La dirección general de Costa y Mar del Ministerio para la Transición Ecológica trabaja desde en septiembre en la zona deMigjorn y la Isla de Buda, en Sant Jaume d'Enveja (Montsià) para paliar la rotura de la barra del frente costero de esta zona para evitar que entre el agua de mar. Antes de Navidad, quince días más tarde de lo previsto inicialmente, se acabarán los trabajos con la aportación de 26.000 metros cúbicos de arena. Las obras se han hecho en medio de otros temporales y ha habido que tapar un pozo que se abrió cuando la ejecución de la obra estaba a la mitad. Sin embargo, como ha destacado el alcalde de Sant Jaume, Joan Castor, los efectos de este refuerzo de la barra ya se han notado en las zonas donde ya se había aportado arena.

El subdelegado del gobierno español a Tarragona, Joan Sabaté, el jefe provincial de Costa y Mar, Antoni Espanya, los alcaldes de Sant Jaume d'Enveja y Alcanar, JoanCastory Joan Roig, han visitado las obras ha visitado las obras de emergencia que se han llevado a cabo en dos puntos de la costa de las Terres de l'Ebre, para paliar los efectos de los temporales del septiembre pasado.

Con una inversión de 440.000 euros, 260.000 en Sant Jaume y 180.000 en Alcanar, se ha reparado los efectos de los temporales en estos dos puntos de la costa ebrense. En la obra de la Isla de Buda, para evitar la entrada de agua de mar, se están aportando 26.000 metros cúbicos de arena para restituir al litoral. La arena se deposita en el extremo norte de la Isla de Buda, para aumentar la cota del cordón litoral que se rompió.

En Alcanar se ha trabajado en las zonas erosionadas de los acantilados con el saneamiento y arreglo de taludes y la mejora de las barandillas de protección. Se han excavado las zonas erosionadas que presentaban un alto riesgo de hundimiento y se ha formado un talud con piedra de Ulldecona, con un pie de rompeolas.

Los trabajos en los dos casos empezaron la primera semana de noviembre y se acabarán este mes de diciembre. En el caso de la Isla de Buda, y teniendo que contrarrestar los efectos otros temporales que se han producido, la obra se ha retrasado quince días. Cómo ha explicado el jefe de Costa y Mar, Antoni Espanya, ha habido que tapar un pozo que se abrió durante el último temporal pero una vez reparado, se completará la aportación de arena.

«Es la actuación más importante históricamente para proteger la barra de arena que separa el cajón de la Isla de Buda con el mar. Los temporales tienden últimamente a romper esta valla fruto de los efectos del cambio climático y el aumento del nivel del mar que exige una actuación transportando arena desde la playa delSerrallo, en cuatro kilómetros, hasta Migjorn», ha explicado el subdelegado. Con el aumento de la cota de la barra de arena, se evita la entrada de agua marina. «La intrusión salina tiene efectos medioambientales graves para la fauna y para la flora», ha añadido.

La rotura de la barra se produce también por el aumento del nivel del mar dentro de la laguna. «Esta aportación de arena posiblemente necesitará con el paso de los años mantenimiento pero impide que la barra se rompa porque está débil. En principio, es una prueba piloto y un ensayo pero creo que se está valorando positivamente también por las personas afectadas, y con el paso del tiempo notaremos los efectos del incremento de la cota de barra y los próximos temporales lo podremos comprobar», ha apuntado el alcalde de Sant Jaume.

En el último de estos temporales, la zona del Migjorn se inundó, cuando los trabajos estaban a la mitad, pero dentro de la Isla de Buda ya se pudo notar que donde se había depositado la arena el mar no había entrado. «Cuando la aportación de arena se pueda completar será un freno a la regresión que el mar hace en la barra. La subida del nivel del mar veremos como gestionarla pero estoy convencido que en la obra acabada la última rotura no se habría producido», ha apuntado Castor.