Trasvassament
La PDE se propone detener «el trasvase» de agua del Ebro en Tarragona y poner fecha de caducidad en el CAT
Denuncian «la opacidad» con que se gestionó la rotura de la cañería y dan por copada la solidaridad del territorio
La Plataforma en Defensa de l'Ebre (PDE) ha anunciado que se trabajarán «para poner fecha de caducidad» al Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT) y que acabe el mini-trasvase del Ebro en el Camp de Tarragona. Consideran que el volumen de agua que inundó la Ampolla la madrugada del viernes demuestra la gran cantidad de recursos que se llevan del río a pesar de tener «un Delta en emergencia», una economía estancada y la constante pérdida de población. También han denunciado la opacidad con que se gestionó el incidente. La PDE hará reuniones con todas las fuerzas políticas del territorio para cuestionarlas sobre el futuro del CAT y expondrá las conclusiones en una asamblea general en marzo. Tampoco descartan hacer movilizaciones.
La Plataforma en Defensa de l'Ebre ha lamentado el incidente y las inundaciones que provocó la rotura de la cañería de la red del mini-trasvase al lado de la AP-7 y la opacidad con que se gestionó. El portavoz Joan Antoni Panisello ha señalado que si el reventón hubiera pasado de día, en verano o en fechas de festividad en el municipio, la situación habría podido ser «más grave» o «una desgracia». «Tampoco sabemos si se produjo por falta de mantenimiento o de previsión», ha añadido.
Para la PDE, las imágenes de las inundaciones que se sufrieron en la Ampolla, evidencian la cantidad de agua que se traslada al Camp de Tarragona, a pesar de ser una época con menos demanda que en pleno verano. El hecho de que los municipios del Ebro tuvieran recursos propios y alternativos para abastecerse durante el corte del suministro, es para la Plataforma una confirmación que estas poblaciones están conectadas con el CAT «por motivos políticos». «Así se da una imagen que también se benefician pero podemos decir que se trata de un trasvase en toda regla», ha apuntado Panisello.
La PDE ha descartado pedir dimisiones porque «tampoco serviría de nada» pero exigen que después de treinta años, los municipios y empresas receptoras de agua han tenido tiempo para crear sus infraestructuras para autoabastecerse y dejar de depender del agua del Ebro. «Creemos que es una pedida legítima, de un territorio que ha cumplido de largo con la cuota de solidaridad aportando, con agua y otros recursos, progreso y futuro. En las Terres de l'Ebre lo único que hemos conseguido es estancamiento, estamos perdiendo población y perdiendo comba en todos los aspectos y aportamos recursos a otros territorios», ha lamentado el portavoz de la PDE.
La PDE defiende que el CAT tiene que acabar y tiene que devolver los caudales del Ebro donde hacen falta. «Tenemos un Delta en emergencia, que necesita agua y sedimentos y tenemos regadíos, como es el Xerta-Sénia, una red imprudente que siempre hemos cuestionado, pero que no tiene agua para regar mientras se envían cuatro metros cúbicos por segundo a las presiones que se marchan, como ha demostrado la avería», ha recordado Panisello. Apuestan por que la red del CAT cambie la captación con depuraciones o desalinización así como los proyectos se lleven al territorio que tiene los recursos. «Lo que pasa por el tubo es metro cúbico a metro cúbico de futuro que se va de las Terres de l'Ebre», ha denunciado.
La PDE pedirá la opinión sobre el futuro del CAT a todos los partidos políticos pero reivindicamos que el Consorcio tenga fecha de caducidad, aunque no sea inmediata. «No puede ser una obra que se convierta en vitalicia y nos fijemos como objetivo parar el CAT y haremos todo el posible para que así sea», ha advertido Panisello. «Lo vemos normal, lógico y ético, una vez saneado dando el impulso turístico, industrial y demográfico del Camp de Tarragona. El agua del Ebro ya ha hecho lo suficiente. Aquí el agua no sobra», ha insistido. «Queremos cuestionar qué perspectivas de futuro hay porque es una muestra de lo que quieren hacer río arriba», ha dicho Manolo Tomàs en referencia al nuevo Plan Hidrológico Nacional.
También reclaman las explicaciones técnicas sobre los motivos de la ruptura. «Hay un espolio de agua y cuando hay accidentes no dan explicaciones», ha reivindicado Panisello. «Un río ha desembocado en la Ampolla. La cantidad de agua que se va es tan grande que la palabra 'mini' se tendría que eliminar y hablado de trasvase por las consecuencias ambientales y económicas que provoca», ha defendido Tomàs.