Tráfico
La C-12 acumula la mitad de los accidentes mortales el año pasado en el Ebro
Se repiten las 21 víctimas mortales de 2018 a pesar de una disminución de accidentes del 39% en la N-340
Imagen del siniestro en la C-12.
La carretera C-12, conocida como el Eix del Ebro, acumula la mitad de los accidentes mortales el año pasado en las Terres de l'Ebre. Mientras que las víctimas mortales se han reducido un 11% a las carreteras catalanas, en las comarcas ebrenses excepto la Ribera d'Ebre, la cifra se mantiene como el 2018, con 21 víctimas mortales. Seis personas murieron en dos graves y «atípicos» accidentes en la C-12, una carretera comarcal, donde ha aumentado el tráfico, también de vehículos pesados. El Gobierno prioriza actuar para mejorar el firme y hacer desdoblamientos de sentido pero también se ha incrementado los controles. Este año habrá más radares, patrullas de paisano y se verá a menudo el helicóptero de tráfico.
De las veintiuna víctimas mortales durante el 2019 en las Terres de l'Ebre, ocho murieron en la C-12 (siete más que el año anterior) y cuatro en la N-340 (una menos que el 2018). También murieron dos personas en la AP-7, dos en la N-430, una en la T-340, una en la C-43, y una en camino rural. La Ribera d'Ebre ha sido la única comarca ebrense con mortalidad cero a las carreteras.
La mayoría de víctimas se han registrado en vías interurbanas. Diecinueve muertos en catorce accidentes. Ha habido dos accidentes con seis víctimas a la C-12 mientras que los accidentes con un solo vehículo implicado se han reducido un 44% y solo una víctima pertenece a colectivos vulnerables como son los motociclistas. Ningún peatón ha muerto durante el 2019.
En cuanto a la edad, destaca un aumento de las víctimas mortales a las carreteras entre los 45 y los 54 años pero se han reducido un 50% las víctimas de la franja entre 65 y 74 años. La distracción continúa siendo uno de los principales factores de los accidentes con víctimas, con un 32%. En cuanto a las infracciones, durante el año pasado se abrieron 184.054 expedientes sancionadores, la mayoría por exceso de velocidad.
En este sentido y para reducir esta casuística, se incrementarán los controles con radares, patrullas de paisano y con más presencia en el territorio del helicóptero de Trànsit, ahora que el Departament tiene dos.
Un dato positivo es que la N-340 ha reducido un 39% la siniestralidad desde que se desviaron los camiones por la AP-7 pero los Mossos estarán muy atentos a los comportamientos a la autopista ahora que se ha liberado. Desde Trànsit tampoco se ha podido establecer una relación directa entre la disminución del tráfico en la N-340 y el aumento en la C-12. «Se está estudiando porque nos preocupa el aumento de la movilidad en esta vía. No acaban de coincidir los datos pero no lo descartamos. Analizado el volumen de tráfico y las franjas horarias no existe coincidencia, por ejemplo con el paso de pesados. No podríamos hacer una relación causa-efecto pero nos preocupa que en la C-12 se tiene que actuar, lo tenemos todos presentes y se actuará», ha dicho el director general de Trànsit, JuliGendrau.
El jefe de Trànsit de los Mossos en las Terres de l'Ebre, SergiSaladié, ha destacado también las más de 3.000 horas de formación que se han hecho durante el 2019 en las Terres de l'Ebre para educar y formar sobre la movilidad segura. También ha avanzado que se incrementarán los controles a las motos los fines de semana, sobre todo en las carreteras de la Terra Alta y en el uso del teléfono móvil cuando se circula.
