La economía de las Terres de l'Ebre retrocede por primera vez desde 2013 a raíz de la pandemia del coronavirus

Todos los grandes sectores de la economía de las Terres de l'Ebre han experimentado crecimientos negativos con respecto al mismo trimestre del año anterior y los más damnificados han sido la hostelería y la construcción con una bajada del 14,6% y el 12,5%, respectivamente; seguidos por el sector de los servicios empresariales (ha caído el 3,6%), el sector primario (-3,2%) y el comercio (-2,0%). El sector de la industria ha sido el que ha registrado una evolución interanual negativa menos marcada (-1,6%).

Por comarcas, el crecimiento interanual de la afiliación ha caído en tres de las cuatro comarcas. Destaca la evolución del Baix de Ebre con un valor de -4,3%, seguido del Montsià con un valor de -3,3% y, de la Terra Alta con un -2,1%. La Ribera d'Ebre ha registrado una evolución neutra respecto del mismo trimestre el año anterior. De entre los 21 municipios con mayor número de afiliados, Flix, Ulldecona y Móra la Nova, los tres con un importante tejido industrial, son los que presentan una evolución positiva con un crecimiento de 10,1, 4,7 y 0,9 puntos porcentuales. Al otro lado, Deltebre, con una gran dependencia de la construcción, ha registrado un -13,6%.

Por otra parte, el paro ha registrado una variación interanual del 1,2%, rompiendo la bajada constante de los últimos seis años. El número total de parados en la demarcación se ha situado en 9.853, es decir, 117 más que en el primer trimestre de2019. Por comarcas el paro ha aumentado en tres de las cuatro comarcas del Ebro. Donde más ha crecido ha estado en el Baix Ebre, un 3%; seguido de la Terra Alta, un 1,7% y el Montsià, un 1,6%. Por el contrario en la Ribera d'Ebre ha seguido disminuyendo a un ritmo importante, el -7,1%.

Optimismo con el sector turístico

En el contexto de este panorama de decrecimiento condicionado por la pandemia del coronavirus, Duro ha querido poner en valor que, dentro del sector turístico, las Terres de l'Ebre están «territorialmente mejor posicionadas que de otras zonas del país a la hora de atraer visitantes, en factores como el peso del mercado doméstico, la presión o la intensidad turística». En el mismo territorio, el peso del mercado doméstico es del 82,63%, el mayor de todas las marcas turísticas catalanas, de acuerdo con los datos de ocupación hotelera. «El sector tiene que promocionarse en base a atractivos que ahora son diferenciales: menos presión turística, más espacios abiertos, más naturaleza», aconseja Duro, recordando que está donde menos incidencia ha tenido la pandemia.