Política
Luz verde de la Confederació Hidrográàica para descatalogar el monumento franquista de Tortosa
El gobierno español se desentiende de nuevo de la propiedad del monolito y responde al Gobierno que ya podía retirarlo del río
La CHE, sin embargo, todavía va más allá y manifiesta, incluso, que «no existe objeción para la eliminación de esta infraestructura del dominio público hidráulico». Sin embargo, recuerda que como organismo competente en la gestión de este dominio público hidráulico, cualquier actuación dentro del cauce del Ebro requerirá su autorización, que se tendría que tramitar a través de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA).
El Ayuntamiento tiene previsto completar el proceso de descatalogación en un próximo pleno. Tres años después de la controvertida consulta ciudadana, la retirada cuenta ahora con el apoyo prácticamente total del consistorio. El trámite final requería los informes favorables de los departamentos de Cultura y Justícia así como de la CHE. Si bien la Generalitat envió los suyos ya hace unos meses, en el caso del organismo de cuenca el Ayuntamiento ha tenido que reclamarlo en dos ocasiones desde el pasado verano.
A esta petición se sumó hace sólo unos días la consellera de Justícia con una carta dirigida a la vicepresidenta del gobierno español, Carmen Calvo. Acusaba a la administración estatal de entorpecer la retirada del monolito por parte de la Generalitat, que asumió este compromiso a partir del impulso de la nueva ley de memoria catalana. También reprochaba el incumplimiento de la obligación de retirar la simbología fascista, tal como prescribe la Ley de memoria histórica de Memoria Histórica de 2007. En este caso, Capella recordaba que tanto el acceso al cauce como la «propiedad de la pilastra» son responsabilidad de la CHE.
La llegada del informe este martes, explican desde Justícia, demostraría que, finalmente, la misiva ha hecho «efecto». Admiten que ya «se han estudiado técnicamente» todas las opciones –sin precisar si existe un proyecto concreto redactado para materializar la retirada del monumento del río. Las mismas fuentes, sin embargo, apuntan que antes de poder empezar a ejecutar hay que cubrir todos los pasos administrativos necesarios para evitar que la actuación pueda ser impugnada o recurrida.
En cambio, fuentes autorizadas del gobierno español han expresado aACN su sorpresa ante el contenido de la misiva. Argumentan, nuevamente, que ningún ministerio ni organismo estatal ha reclamado o asumido la titularidad del monumento de exaltación fascista, inaugurado el año 1966 por el mismo dictador Francisco Franco cuando se cumplían 25 años de la Batalla del Ebro y desnudo de algunos de los elementos fascistas más evidentes durante las últimas décadas.
La CHE rechaza la titularidad
La misma CHE ya se desvinculó en una carta de respuesta al director del Memorial Democràtic, Jordi Font, en noviembre de 2019. «Esta Confederacióno ostenta ningún tipo de propiedad o titularidad sobre el monumento, si bien al encontrarse enclavado en dominio público hidráulico cualquier actuación sobre elmismo requerirá autorización de este organismo de cuenca», manifestaba la presidenta del organismo, Maria Dolores Pascual.
Todo, según interpretan las mismas fuentes del gobierno estatal, y de acuerdo con la misma ley de 2007 aprobada por el entonces también gobierno socialista e independientemente de la descatalogación iniciada por el consistorio, la Generalitat podía haber actuado ya hace tiempo retirando del medio del río el monolito con el único requisito de pedir la autorización a la CHE como titular del cauce. Un trámite, apuntan, que no ha der suponer ningún obstáculo para hacer efectiva la medida, según ha manifestado el mismo organismo en su informe.
