Medio Ambiente
El colectivo Terra Alta Viva reprocha al Gobierno que no frene la masificación eólica
El movimiento se presenta escenificando una parodia en la zona donde se prevé instalar la central Tramuntana 5
«Habitantes de la Terra Alta, nos encontramos en este lugar emblemático para hacer saber a toda la población y a todas las respectivas alcaldías implicadas que de manera irrevocable: queda derogada y anulada toda implantación de centrales eólicas y centrales solares, así como la construcción de líneas eléctricas en todo el territorio que abarca la Terra Alta, con el objetivo de blindar una comarca ya muy saturada por la masificación eólica», ha clamado el Pallarés ficticio.
El manifiesto satíricose cerraba con la afirmación que «el Gobierno hemos recapacitado y de ahora en adelante la Terra Alta ya no será aquel territorio abandonado por la administración y que sólo se acordaban de ella cuando se tenía que instalar molinillos». Justo después, los activistas se han girado de espalda para mostrar los característicos monigotes de papel del día de los Inocentes enganchados ensus espaldas.
Ha sido la primera acción del nuevo colectivo, que se quiere constituir legalmente en entidad, para denunciar el incumplimiento del compromiso público efectuado hace dos años por el Gobierno en el sentido de detener el constante bombardeo de proyectos eólicos en la comarca. De momento, a lo largo de este 2020 tres centrales más han obtenido el visto bueno en su emplazamiento por parte de la Ponencia de Energías Renovables y una más está pendiente de superar el trámite.
'Paraíso rural'
Terra Alta Viva ha recordado que este freno tenía que permitir potenciar y preservar la comarca, como «paraíso rural», ayudando y reactivando la economía local, basada en la agricultura, fomentando productos como el vino y el aceite así como fomentando turismo rural de calidad, promoviendo productos locales y protegiendo los espacios históricos, especialmente, los de escenarios de la batalla del Ebro.
«Será la primera de muchas acciones que haremos en adelante. Ponemos en marcha un movimiento nuevo al que se apunta mucha gente del tejido empresarial, hostelería, restauradores, campesinos y otros movimientos que ya había en la comarca. Queremos hacer un movimiento muy fuerte para plantar cara a todos los proyectos que siguen cayendo enla Terra Alta, que ya son muchos. Ya está muy masificada y no necesitamos que venga nadiea plantar ningún molinillo más», ha razonado el portavoz del colectivo, Jordi Clua.
El colectivo ha avisado de que la avalancha de proyectos en marcha supondría una presión industrial muy fuerte sobre un territorio que ha valorizado la actividad vitivinícola y turística como apuesta de futuro. También alertan de las presiones de las promotoras sobre los propietarios para que firmen rápidamente contratos para permitir la instalación y las limitaciones que encuentran los ayuntamientos para frenar estos proyectos a raíz del decreto 16/2019 que tenía que regular estas implantaciones. Clua ha recordado también la existencia de varios proyectos de centrales solares y el proyecto de una línea de evacuación que cruzaría toda la comarca.