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La PDE se opone a un posible minitrasvase del Ebro al Baix Camp

Seis pueblos de la comarca reclaman la llegada del agua por problemas de nitratos en los acuíferos y etapas de sequía

Primer plano de la bandera antitransavasament de la PDE en el barco Lo Sirgador del río Ebro.

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La Plataforma en Defensa del Ebro (PDE) se opone a un posible minitrasvase del Ebro al Baix Camp. La Plataforma denuncia que autorizar más detracciones de agua del río con nuevas concesiones del Consorcid'Aigües de Tarragona (CAT) es «incongruente» con defender el Delta. Les Borges del Camp, Alforja, Riudecols, Botarell, l'Aleixar y Vilaplana son los seis pueblos del Baix Camp que lo piden. Argumentan que sufren contaminación de los acuíferos y problemas de abastecimiento por episodios puntuales de sequía. Los alcaldes de estos municipios se reunirán este viernes para emitir un posicionamiento conjunto para defender este proyecto, con un coste valorado en 5,3 millones de euros en la primera fase, si bien podría subirse a los 8 millones de euros.

En el pueblo de Alforja ya se ha iniciado la tramitación para hacer llegar agua del minitransvassament del Ebro al municipio. El pleno del Ayuntamiento lo aprobó por unanimidad a mediados de mes. Todas las fuerzas políticas presentes en el consistorio (Junts, ERC y PSC) estuvieron de acuerdo. En este pueblo de 1.900 habitantes sólo disponen del agua de un par de pozos y se registran concentraciones de nitratos, arsénico y fitosanitarios en sus acuíferos.

Desde Alforja se defiende la necesidad de garantizar el abastecimiento constante y regular de agua sin tener que depender de la climatología y asegurarse los recursos hídricos que en el futuro puede necesitar el municipio. «La llegada del agua del Ebro aseguraría los caudales necesarios», mantienen fondos municipales. Según cálculos iniciales de este municipio, el coste de este proyecto sería de unos 431.000 euros.

Alforja ya es uno de los 63 municipios (y 25 industrias) consorciados del CAT, pero sólo dispone de una dotación de reserva. Para hacer efectiva la llegada de esta agua, se ha delegado al ConsellComarcal del Baix Camp la petición de una subvención conjunta en la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) que podría comportar una aportación de la ACA de 4 millones de euros para un proyecto que tiene un coste valorado actualmente en 5,3 millones, en la suprimera fase.

Al proyecto se añaden cinco municipios más, pueblos pequeños situados en el norte de la comarca que sólo suman entre 7.000 y 8.000 habitantes –desde Vilaplana, con medio millar de vecinos, en les Borges del Camp, el más poblado, con 2.000. Es por eso que estos seis pueblos quieren reorganizarse y tienen intención de constituir una mancomunidad que se ocupe de asumir y desarrollar la ejecución de la inversión y de la gestión de la nueva infraestructura.

Oposición ebrense

La PDE se opone a esta nueva concesión de agua del Consorci. «Cada detracción que se hace en la cuenca del Ebro, esté donde esté, se haga a Santader o con el CAT, es lo mismo. Al final repercute en el tramo final del río, en el Delta», ha denunciado la portavoz Matilde Font. La Plataforma insiste en el Gobierno en que hace falta hacer una moratoria de las concesiones de agua del río y plantear un uso del agua «racionalizado». «Si se quiere salvar el delta del Ebro, hacen falta políticas que no saquenmás agua y que hagan bajar más caudal por el río y más sedimentos, que están retenidos en los 200 embalses que está toda la cuenca», ha reclamado.

Desde la PDE reclaman al CAT que hace años que se tendría que estar devolviendo los caudales que coge «porque el Delta lo necesita». «De lo que se llevan, todavía se llevan más», ha lamentado la portavoz. También reclaman al Gobierno que deje de ser «incongruente», oponiéndose al trasvase del Ebro en Santander, que también rechaza la PDE mientras aprueban más concesiones de agua en el área de Tarragona. «La Generalitat tiene que dejar de hacer políticas medioambientales discordantes como decir que quieren salvar el delta del Ebro mientras aprueban planos por nuevos canales de regadío, como el Segarra-Garrigues o el Xerta-Sénia, o ampliar la red del CAT para llevar agua más arriba de donde llega ahora», ha denunciado Font.

Los consumos de agua del CAT se han reducido los últimos años, sobre todo enla industria, pero la Plataforma rechaza que se sigan ofreciendo. «Queremos que dejen de coger agua del CAT, que vayan reduciendo y devuelvan los caudales hacia el tramo final del Ebro», ha insistido la portavoz.

Representantes de la PDE han hecho varias reuniones en Alforja y también en la Conca de Barberà, donde ya se ha presentado la primera fase para ampliar la red del minitrasvase hacia la comarca. La Plataforma hará llegar información a la ciudadanía sobre los efectos que tiene el proyecto. «Seguiremos haciendo lo que tengamos al alcance y trabajando conjuntamente para oponernos a estas detracciones del caudal del río Ebro, cuando allí tienen agua suficiente para el consumo y se pueden hacer otros tipos de políticas para abastecer a la gente sin extraer agua del CAT», ha apuntado a Matilde Font.

Ministransvasament en la Conca de Barberà

El Consorci d'Aigües de Tarragona entregó el 25 marzo, al ConsellComarcal de la Conca de Barberà, el proyecto de la primera fase para extender la red entre Sarral a Forés. La administración comarcal actuará como entidad suministradora de agua en los ayuntamientos y regulará la conexión con el CAT. El proyecto consta de tres fases y se estima que tendrá un coste de 11,7 MEUR, financiados por la Agència Catalana de l'Aigua, la Diputació de Tarragona y los municipios. Todo permitirá que Conesa, Forès, Llorac, Passanant y Belltall, les Piles, Santa Coloma de Queralt, Sarral, Savallà del Comtat y Vallfogona de Riucorb mejoren el abastecimiento de agua potable. La primera fase del proyecto está pendiente de ejecutar algunas expropiaciones y resolver la financiación. Las obras podrían empezar a finales de este año y se alargarán ocho meses.

La concesión límite del CAT es de 126 hectómetros cúbicos (hm³) anuales (según la ley de 1981) pero en agosto del 2019 se redujo a un máximo de 94,71 hm³ porque las industrias gastan menos. El consumo medio de los últimos años se ha situado sobre los 73 hm³ y el máximo histórico del Consorcise registró en el 2007, con 79,9 hm³. Fuentes del CAT apuntan que hay margen para ampliar los municipios consorciados y que la repercusión de los proyectos de la Conca de Barberà o el posible minitrasvaseen el Baix Camp tiene poco impacto porque se trata de municipios con poca densidad de población.

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