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Amposta recupera una cruz de la antigua diligencia de Barcelona a Valencia del siglo XIX

La cruz se mostrará en la exposición 'La revolució dels transports a Amposta' en el Museu de les Terres de l'Ebre

Dos operarios retirando la cruz de la antigua diligencia de Barcelona en Valencia del siglo XIX que se ha recuperado en Amposta.

Amposta recupera una cruz de la antigua diligencia de Barcelona a Valencia del siglo XIXACN

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Amposta ha recuperado una cruz de la antigua carretera Real de Barcelona a Valencia, una ruta directa del correo y diligencia que pasaba por la capital del Montsià, establecida a principios del siglo XIX. Cuando se hicieron las obras de la actual carretera N-340 (en 1988), un vecino conservó la única que quedaba. Carreteras del Estado ha autorizado al Ayuntamiento de Amposta y el Museude les Terres de l'Ebre retirar la cruz y trasladarla al centro museístico. La próxima semana se podrá ver a la exposición La revoluciódels transports a l'Amposta de principidel segleXX y después se incorporará al fondo permanente del Museo.

Del antiguo itinerario de Valencia a Barcelona por Amposta se tiene constancia desde el siglo XVI, pero fue el 1801 que se hizo pasar la Real Diligencia por Amposta. En estos viajes entre Barcelona a Valencia había paradas en Vilafranca, Tarragona, Amposta, Vinaròs y Castellón, y la ruta se hacía en dos días. Eran caminos considerados peligrosos y los viajeros estaban expuestos a los frecuentes robos de los asaltadores.

El americano Alexander Slidell describió en un libro que, al salir de Amposta hacia Valencia, la diligencia en la que viajaba fue asaltada y murieron el conductor y el ayudante. El inglés Richard Ford describió las cruces «de piedra, bastas y burdas», que los viajeros encontraban «en el peligroso camino de Amposta», en el libro The book for travellers in Spain (1847). Según Ford, las cruces recordaban el asesinato de los compañeros de Slidell, el día 30 de octubre de 1826. Uno murió apuñalado (28 puñaladas) y el otro a golpes de piedra enla cabeza, a manos «de tres viles rateros o ladronzuelos».

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