El nuevo Plan Hidrológico del Ebro fija un caudal mínimo de 100 metros cúbicos por segundo en la desembocadura grande parte del año

En cambio, en el tramo entre el azud de Xerta y Tortosa, el caudal mínimo baja entre los 80 y 91 metros cúbicos por segundo todos los meses excepto febrero y marzo, cuando llega a 150. Unas cifras bastante similares a las actuales. Se trata de cifras para años hidrológicos con aportaciones consideradas «normales», pero en cualquier caso siguen muy alejadas de la propuesta aprobada por la Comissió per la Sostenibilitat de les Terres de l'Ebre y ratificadas por el Parlamento –de 7.732 hectómetros cúbicos anuales para este caso concreto- como garantía para las necesidades ambientales del tramo final del río y Delta.

Destaca también el hecho de que el río Siurana sea el único caso en el cual la CHE no ha fijado ningún caudal ecológico. El organismo lo argumenta porque los volúmenes de agua «están pendientes del resultado del proceso de concertación de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) en el marco de la Mesa del Siurana». Esta mesa, en la cual se reúnen organismos públicos, administraciones locales, entidades ecologistas y la Comunitat de Regants del Pantà de Riudecanyes, se constituyó en diciembre del 2018 pero tan sólo ha mantenido cinco reuniones, la última de las cuales fue hace más de un año.

Según la documentación de la CHE, la nueva planificación hidrológica permitirá crear unas 47.500 nuevas hectáreas de regadíos en toda la cuenca, de las cuales cerca de 13.5000 en Cataluña. Según remarca el organismo, sin embargo, estos regadíos no supondrán un incremento de la demanda de agua en la cuenca porque, sobre el papel, se podrán atender con agua liberada por la modernización de regadíos y por la revisión de dotaciones que se efectuará en próximas revisiones del plan.

Otro de los aspectos fundamentales que el documento aborda, según la misma CHE, es la coherencia con las propuestas del Plan de Protección del delta del Ebro que ultima el Ministerio para la Transición Ecológica. En este sentido, asegura que el Plan Hidrológico recoge las medidas de este proyecto relativas a actuaciones en la costa financiadas por la Dirección General de la Costa y el Mar así como estudios y actuaciones de la Dirección General del Agua por un importe total de 11,3 millones de euros. Dentro de este capítulo figura la realización de varios estudios y pruebas relacionadas con la recuperación el tráfico sedimentario en el tramo final del río en colaboración con el CEDEX y en coordinación con la Generalitat.