Municipal
El Ayuntamiento de Tortosa prevé terminar las obras de la plaza de la Catedral a principios de septiembre
Los trabajos de museización de la cota 0 empiezan este 9 de julio y se espera que finalicen en octubre
El Ayuntamiento de Tortosa prevé acabar las obras de la plaza de la Catedral por las fiestas de la Cinta, entre finales de agosto y principio de septiembre. Los trabajos suponen la construcción de una nueva escalinata en el templo y la pavimentación de la plaza, que seguirá el mismo estilo que las calles próximas. La alcaldesa de Tortosa, Meritxell Roigé ha destacado la importancia de una actuación que tiene que permitir dotar la ciudad de un «mirador hacia el río Ebre sin vehículos». Los trabajos, que se han alargado con los años, coincidirán con la finalización de la restauración de la fachada central del templo. Paralelamente, el 9 de julio se iniciarán las obras de museización de la cota 0, que se alargarán tres meses.
El arquitecto de las obras de la plaza de la Catedral, Josep Camps, ha explicado que se plantea una urbanización del espacio con elementos similares a la plaza Absis, próxima a la plaza de la Catedral. «Tendrá los mismos tipos de acabados, el mismo detalle en hormigón, así como también el mismo alumbrado», ha señalado. La alcaldesa de Tortosa ha indicado que en las últimas semanas, coincidiendo con el tramo final de las obras, se han instalado las vigas de la estructura de la plaza y se han hecho las pruebas de seguridad pertinentes. Este lunes, por ejemplo, se han llevado a cabo las tareas de impermeabilidad del espacio para evitar goteras en caso de tormenta. Según Roigé, este proyecto permitirá dar continuidad al conjunto de centro histórico de la ciudad, a la vez que se recupera el espacio para el conjunto de la ciudadanía más allá de los actos litúrgicos para convertirse en un centro neurálgico de la capital del Baix Ebre.
Los trabajos también permitirán la consolidación de los restos arqueológicos de alto valor en la cota 0, unas obras que tendrían que ver su fin en octubre. En este caso, tienen un coste de 216.057,52 euros y van a cargo de la empresa Grop Exposicions Museogràfiques SL. Una vez acabado el proyecto, se podrán visitar los restos al nivel inferior, consistentes en una parte de muralla romana del siglo I, 55 metros de muralla del siglo V, un ábside de una edificación religiosa visigoda y la fachada fluvial del Renacimiento del siglo XVI. Según Roigé, este conjunto histórico permitirá entender mejor quince siglos de historia de la ciudad.
De forma paralela, el Arzobispado de Tortosa adjudicó las obras de restauración de la fachada del templo. Los operarios trabajan en la parte central de la fachada desde abril y estará completamente restaurada a finales de verano, coincidiendo con la finalización de la plaza. La obra está financiada por el Ministerio de Fomento, el Departamento de Cultura de la Generalitat, la Diputación de Tarragona y el Ayuntamiento de Tortosa.
Un proyecto que se ha alargado con los años
El proyecto se inició 2015, a partir del derribo de las casas justo situadas delante del templo tortosino y cuando se produjo el hallazgo de los restos en sus cimientos. Tres años después, en el 2018, la empresa Benito Arnó se comprometió a hacer las obras de pavimentación de la plaza de la Catedral. Dos años después, coincidiendo con el estallido de la pandemia, la compañía renunció al proyecto «por la complejidad de la obra». Después de esta renuncia, en agosto de 2020 se pudo desencallar la situación de la mano de la empresa Acsa Sorigué con un presupuesto de 1,76 millones de euros. La compañía fue la única candidata que se presentó al proceso de adjudicación.