Inundaciones
El alcalde de Alcanar: «Parecía que se acababa el mundo»
Joan Roig ha indicado que «hoy todo el mundo ha podido ver las imágenes conmovedoras y el impacto emocional que supone ver tu pueblo así»
El alcalde de Alcanar, Joan Roig, ha asegurado este jueves que «parecía que se acababa el mundo», en referencia al temporal que ayer asoló este municipio, donde cayeron 252 l/m2 en tres horas, y que ha provocado numerosos desperfectos.
El temporal que cayó ayer en la comarca del Montsià se ensañó también en Sant Carles de la Ràpita, donde las precipitaciones dejaron 142 l/m2.
En declaraciones a RAC1, Roig ha indicado que «hoy, al salir lo suele, hemos sufrido un baño de realidad. Todo el mundo ha podido ver las imágenes conmovedoras y el impacto emocional que supone ver tu pueblo así. Eso no se olvidará nunca: parecía que se acababa el mundo».
De manera parecida ha opinado el alcalde de Sant Carles de la Ràpita, Josep Caparrós, que ha definido lo que han vivido con una palabra: «catástrofe», y se ha referido también en las imágenes «conmovedoras» recogidas a las redes sociales.
«Hoy -ha proseguido Caparrós- brilla el sol y da luz al desastre y a la barbaridad de los daños ocasionados por una tormenta inesperada, porque la previsión no era esta».
A su juicio, ahora toca «hacer la valoración de los daños y poner al día plazas, calles, viviendas, propiedades y nuestros pueblos», ha remachado el alcalde de la Ràpita, que ha señalado daños en la vía pública, en polígonos, equipamientos, en el Museu del Mar de l'Ebre, así como el desalojo de un grupo de niños.
«Ahora hace falta hacer balance y buscar soluciones. Esperamos que las administraciones estén al lado de los pueblos. Necesitamos ayudas extraordinarias, a fondo perdido, no subvenciones. Ya sufrimos las tormentas el 2018, con unos daños de 600.000 euros, el temporal marino del 2019, y ahora este del 2021», ha insistido Josep Caparrós.
De igual manera se ha expresado Joan Roig, que ha reclamado «ayudas por desastre natural». «En 2018, las ayudas llegaron un año y medio después, cuando el chubasco cayó en plena campaña citrícola y destrozó los caminos», ha remachado.
Es por eso que Roig espera que «las administraciones estén a la altura», teniendo en cuenta que en 2018, cuando las lluvias no fueron tan graves como ayer, sufrieron daños «por 8 millones».
El alcalde de Alcanar ha pedido asimismo «no caer en el desaliento». «Lo volveremos a hacer, pero no podemos solos», ha clamado.