Delta de l'Ebre
El gobierno español autoriza finalmente el movimiento de arenas en el Delta pero admite que no se iniciará hasta septiembre
Las discrepancias en el trámite y la coincidencia con el periodo de nidificación han ido posponiendo la actuación urgente
El gobierno español ha aprobado, finalmente, el proyecto de urgencia para reubicar arenas del litoral del Delta de l'Ebre con el objetivo de frenar la regresión. En un comunicado, el Ministerio para la Transición Ecológica ha anunciado la resolución favorable a que cierra el procedimiento de evaluación ambiental simplificada. Con todo, el Ministerio ha admitido que la actuación urgente, que tenía que empezar antes de diciembre, no lo podrá hacer hasta septiembre por|para los «condicionantes ambientales impuestos por el parque natural» ante el inminente inicio de la nidificación de las aves. El proyecto, con un presupuesto de unos 4 millones de euros, supondrá mover 317.000 metros cúbicos de arena acumulada en zonas excedentarias a otras deficitarias que se han visto afectadas por los temporales.
Por su parte, el comunicado ministerial deja caer que procedimiento se ha acabado alargando porque se han tenido en cuenta las «observaciones» de la Dirección General de Políticas Ambientales y el parque natural, «que solicitaron analizar con más detalle los impactos del proyecto sobre elementos de la Red Naturaleza 2000». Un extremo que el gobierno español no consideraba necesario pero que la Generalitat requirió para «blindar jurídicamente» la actuación.
Finalmente, la fase de exposición pública se cerró en noviembre y, según el Ministerio, las observaciones de los organismos ambientales de la Generalitat dieron lugar a la incorporación de las enmiendas a la documentación inicial que fue aprobada definitivamente por Políticas Ambientales y el parque natural el enero pasado. Finalmente, sin embargo, la proximidad temporal del inicio del periodo de nidificación de las aves protegidas en el delta del Ebro obligará posponer las obras en septiembre.
Con un presupuesto aproximado de unos cuatro millones de euros, se han previsto actuaciones de extracción, transporte y aportación mediante medios terrestres. Las arenas se sacarán de zonas con «continúa sedimentación» y servirán de «préstamo» a otras zonas con déficits de sedimentos, que son las que más afectadas se han visto por los temporales de los últimos años, especialmente el Gloria.
Afectarán espacios sistemas costeros con arenas –playas, dunares y cordones litorales- de los municipios de Deltebre, Sant Jaume d'Enveja y Sant Carles de la Ràpita. Concretamente, en el litoral de Deltebre, se prevé trasvasar 150.000 metros cúbicos de arenas de la punta del Fangar y de los depósitos exteriores de las playas en las playas del Fangar –zona de los Vascos-, tramo sur de la Marquesa, tramo sur de la balsa de la Arena y Riumar. En Sant Jaume d'Enveja, se movilizarán 17.000 metros cúbicos del sur de la playa del Serrallo hacia el cordón litoral de la isla de Buda. Finalmente, se extraerán 150.000 metros cúbicos de la playa sur de la punta de la Banyapara reforzar la barra del Trabucador.