Tradición
Las Terres de l'Ebre recuperan la normalidad en los toros
El año pasado no hubo ninguna denuncia por incumplimiento de las buenas prácticas
La fiesta de los toros en las Terres de l'Ebre se prepara para recuperar «la normalidad» y programar los espectáculos y correbous habituales. El año pasado los días de toros y las actividades se redujeron a la mitad –de 205 días en 2019, a 102; y de 440 espectáculos en 2019, a 173. También se hicieron muchos menos toros embolados – de 128 a 63- y sólo 1 toro de cuerda –de los 54, de 2019.
El Gobierno se ha reunido, este miércoles, con los veterinarios y las peñas y comisiones taurinas para hacer balance de la atípica, pero finalmente posible, temporada taurina del año pasado en las Terres de l'Ebre.
El otro balance «positivo» es que no ha habido ninguna denuncia por incumplimiento de las buenas prácticas –suele haber una quincena cada año, y 3 o 4 sanciones.
La temporada taurina de las Terres de l'Ebre quedó completamente anulada el año 2020. Después del confinamiento estricto por la covid, el plan de reanudación del Procicat para las actividades culturales no permitió la celebración de correbous y la fiesta quedó totalmente paralizada, a pesar de las advertencias por la situación de las ganaderías de toros bravos, que dependen de la fiesta y los correbous, estaban sufriendo para alimentar a los animales, y tuvieron que sacrificarlos.
El año pasado la temporada taurina no pudo arrancar hasta la fiesta mayor de Sant Joan de l'Ampolla. Se estableció un protocolo con plazas portátiles o plazas con remolques, con aforo limitado y control de acceso en todos los pueblos. Para participar de los correbous en plaza o verlo como público, se necesitaba un registro y una entrada. Sin toros en la calle y otras modalidades que no encajaban en este protocolo, los días y espectáculos organizados el pasado año se redujeron a la mitad, respecto al 2019.
Según los datos de la delegación del Govern en el Ebre, se celebraron 102 días de correbous, 63 toros embolados, 1 de cuerda y 173 espectáculos taurinos. Hace tres años, habían sido 440 actividades taurinas en 205 días de correbous -128 embolados y 54 de cuerda-.
Sin denuncias
El delegado Albert Salvadó ha destacado que haya sido una temporada sin «conflictividad destacable» pese a las condiciones «del entorno» y las restricciones. No ha habido ninguna denuncia en toda la temporada y se atribuye a la reducción de los actos así como a más «atención» de los organizadores para cumplir con el protocolo y las medidas sanitarias. Hace tres años se presentaron 17 denuncias y se impusieron 3 sanciones. «Es una muy buena noticia que se haya desarrollado sin ninguna incidencia remarcable», ha insistido Salvadó.
De hecho, la media de denuncias por incumplimiento de la normativa suele ser de una quincena al año. Las gestiona Interior y sólo una quinta parte acaba conllevando sanciones para los ayuntamientos u organizadores. «Hay voluntad para hacer la fiesta bien y que se reduzcan el número de denuncias porque significará que las cosas se hacen muy bien», ha apuntado Miquel Alonso, director de los servicios territoriales de Interior en el Ebre.
Para trabajar en este sentido, se reunió por primera vez a los alcaldes de los municipios que celebran fiestas con toros, la Agrupació de Comissions i Penyes Taurines de les Terres de l'Ebre y los veterinarios que controlan las buenas prácticas durante los espectáculos, un encuentro que debe repetirse periódicamente, según Salvadó. Alonso detalló que ya han salido compromisos, como revisar y mejorar algunos corrales, uno de los motivos más recurrentes en las denuncias que se presentan. Otros suelen ir ligadas al incumplimiento de los tiempos, por ejemplo, del encendido de bolas de fuego en los cuernos de los toros, en los embolados.
La temporada taurina de las Terres de l'Ebre comienza, desde hace unos años, por Sant Jordi en Aldover, y sigue en el Mas de Barberans o Alcanar por las fiestas mayores de mayo. Este año se prevé que el calendario se pueda programar completo, hasta las fiestas de Sant Martí de Xerta -que cierran la temporada en noviembre-. Según datos de la Agrupació de 2019, el sector taurino y la fiesta de los correbous tiene un impacto en el territorio de más de 4 millones de euros.
Correbous en la escuela
El Govern ebrense, y en este caso el departamento de Educació, también tiene sobre la mesa el polémico proyecto de la entidad taurina para promover la fiesta en las escuelas e institutos. La delegada ebrense Montse Perelló declaró que las actividades y talleres extraescolares se supeditarían a la autonomía y de edición de cada centro educativo, y el delegado del Govern ha precisado que se sigue evaluando. «No se trata de incorporar la propuesta al currículo sino como actividad extraescolar y en función de la autonomía de cada centro y el departamento lo está trabajando», ha explicado Salvadó. La asociación antitaurina Tots Som Poble ya hizo llegar su malestar a Educació.