Sociedad
Los pescadores de Deltebre denuncian problemas para salir a pescar desde el puerto fluvial
El Ayuntamiento prevé un segundo dragado en la desembocadura del río para ayudar a las barcas a salir al mar
Los pescadores de Deltebre hace un mes y medio que tienen problemas para salir a pescar desde su puerto fluvial, el único de Cataluña. Los dos últimos temporales han vuelto a acumular mucha arena en la bocana y sólo una cuarta parte de las embarcaciones han podido salir al mar por la desembocadura del río Ebro. Alguna, incluso, atraca estos días en el puerto de la Ràpita. A la espera de que el Ayuntamiento pueda ejecutar un segundo dragado a finales de abril, la Cofradía insiste en que la solución pasa por que el IDECE (Institut pel Desenvolupament de les Comarques de l'Ebre) pueda extender la gestión y el mantenimiento del río de Amposta hasta la desembocadura y pide la implicación de las administraciones competentes para hacerlo posible.
Como ha recordado el secretario de la Cofradía de Pescadores de Deltebre, Pasqual Chacón, el problema de la bocana de la desembocadura del Ebro lo sufren los pescadores del puerto fluvial desde hace dos décadas, pero el cambio climático y que la intensidad y la violencia de los temporales se agrave, hace que las medidas de urgencia ya no sean suficientes.
Este año las dificultades empezaron hace un mes y medio con los temporales de enero. La borrasca Celia de los últimos días lo ha agravado. Aunque los pescadores de Deltebre «son especialistas» en salir por la bocana, de la docena de barcas que lo hacen habitualmente para pescar en el mar, estos días sólo lo pueden hacer dos o tres. Hay diecisiete barcas más que, si no pueden salir al mar, pescan dentro del río.
La Cofradía agradece «el esfuerzo y la colaboración intensa» del Ayuntamiento de Deltebre, que ya tiene a punto un segundo dragado. Se tenía que hacer hace un mes, pero que el mal tiempo lo ha pospuesto para el próximo mes. Aún así, Chacón recuerda que «llueve sobre mojado». «Tenemos que intentar que entre la administración, el Ayuntamiento y los pescadores encontremos la manera que haya continuidad en el mantenimiento de la bocana», ha insistido. La petición es que la competencia la asuma el IDECE –hecho que tendría que autorizar el Estado- porque ya gestiona el mantenimiento del río entre Ascó y Amposta.
Como ha apuntado el alcalde de Deltebre, Lluís Soler, no se puede hablar de navegabilidad del río Ebro si no se garantiza el acceso por la bocana, una «cuestión esencial» para el sector pesquero y turístico del municipio, que serviría también para conseguir «sedimentos km 0» para las actuaciones para mitigar contra el retroceso de la línea de costa.
Chacón remarca las «buenas intenciones» que les trasladan a los responsables de Puertos y Costas, pero pide que se concrete una solución. «Todo el mundo entiende el problema, pero no hacen nada. La gente necesita salir a pescar y hacer este mantenimiento sería tan fácil... sobre todo cuando oímos hablar de inversiones millonarias, pero siempre de Tarragona para arriba», ha denunciado el secretario de los pescadores de Deltebre. La Cofradía recuerda que ha sido complicado recibir el permiso para hacer estos dragados y que se requiere alquilar y llevar una draga de fuera. «Con una draga permanente en la bocana o el mantenimiento de todo el tramo desde Amposta, no se acumularía tanta arena y en pocos días de trabajo - después de un temporal- tendríamos bastante», ha defendido el secretario.
Justamente ha sido el IDECE que ha hecho la batimetría previa al dragado que impulsa el consistorio. Se desconoce con concreción cuál puede ser la acumulación de arenas ahora mismo. «Tiene que ser importante porque la salida del río antes tenía una anchura de 100 metros y ahora es de 300 metros», ha detallado Chacón. «Es la arena que falta a las playas y otros espacios como la Isla de Buda. La arena no crece ni se multiplica, se mueve. Es la que falta en otras partes», ha recordado.
Gesto simbólico
El Ayuntamiento de Deltebre recuerda que dragaron la bocana en el 2019, a pesar de no tener competencias, como un gesto «simbólico y de responsabilidad» ante la inacción de las administraciones competentes, la Generalitat y el estado español. Extrajeron alrededor de 1.500 metros cúbicos de arena y definieron un calado de 2,5 metros. Hace tres años ya se reclamó al IDECE que asumiera el mantenimiento dentro de las tareas de navegabilidad del río. La propuesta consistía en hacer cuatro dragados anuales para mantener la bocana en un estado óptimo.
Soler recuerda que «fue una acción puntual» para reivindicar que fuera «una constante en el tiempo y a cargo de las administraciones competentes» para facilitar el acceso y salida de las barcas pesqueras y náuticas. El consistorio ha decidido hacer un segundo dragado en las próximas semanas para «minimizar el peligro» que representa una bocana cerrada por los temporales, y pedirán la financiación a las administraciones.