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Cultura

La 15.ª edición de Litterarum en Móra d'Ebre se reafirma como referente de espectáculos literarios

La feria del libro ebrense bate récord de ventas con más de 800 ejemplares vendidos en un fin de semana

La feria del libro ebrense de Mora d'Ebre se despide de la 15ª edición este domingo.

La 15.ª edición de Litterarum en Móra d'Ebre se reafirma como referente de espectáculos literariosACN

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La feria de espectáculos literarios de Móra d'Ebre, Litterarum, se ha despedido este domingo de la decimoquinta edición y se ha reafirmado como uno en lo referente a toda Cataluña. Más de 3.500 personas han disfrutado de un programa que ha apostado por el público infantil y joven. Precisamente para atraer este segmento de la población, se ha hecho un maridaje literario que ha colgado el cartel de completo, tal como ha celebrado la directora del certamen Gemma Sastre. Con respecto a la feria del libro ebrense, se ha luchado récord de ventas con más de 800 ejemplares vendidos en tres días. Este año se ha recuperado la presencialidad de los actos y se han programado catorce espectáculos literarios y una treintena de presentaciones de libros con autores u obras vinculadas a las Terres de l'Ebre.

Después de quince ediciones, Litterarum ha trabajado para abrir el abanico de público y se ha fijado en las familias a la hora de preparar un programa que ha mezclado espectáculos literarios con presentaciones de libros, talleres y otras actividades en torno a la literatura. Según la directora del certamen, Gemma Sastre, uno de los grandes éxitos de esta edición ha sido el maridaje literario que se ha celebrado este sábado al Castillo de Móra d'Ebre y que ha agotado a las 200 localidades. La principal novedad de este año ha constado de una cena con productos de proximidad y vinos de las bodegas de la comarca que se han combinado con el espectáculo 'Terra i cel' a cargo de Judit Puigdomènech, con poemas de Clementina Arderiu y de Maria-Mercè Marçal.

Nacido en el 2007, Litterarum se ha reafirmado como uno en lo referente a Cataluña para promocionar la literatura a través de espectáculos que se basan en textos literarios escritos en lengua catalana que no estaban concebidos originariamente para la escena. Con esta premisa, el programa de este año ha vuelto a llenarse de propuestas de pequeño, medio y grande formado que se han repartido en diferentes espacios de la capital de la Ribera de Ebro durante todo el fin de semana. Para la directora del certamen, esta edición ha servido para reivindicar el Premio Nacional de Cultura otorgado en el 2019.

Después de dos años condicionados por las restricciones de la pandemia, la normalidad se ha recuperado en todos los actos que se han llevado a cabo hasta este domingo. Sin embargo, Sastre ha apuntado que la ventana digital abierta en las dos últimas ediciones han servido para darse a conocer a nuevos públicos. Por este motivo, ha asegurado, se mantendrán algunos 'streamings' de cara a futuras ediciones. Por otra parte, la feria también representa un punto de encuentro para los profesionales del sector; según la organización en esta decimoquinta edición se han acercado a Litterarum una setentena de programadores de toda Cataluña y la Comunidad Valenciana.

Protagonismo especial para los autores y obras literarias ebrenses

Con respecto a la Feria del Libro Ebrense, que coincide con la celebración de Litterarum, se ha registrado un récord de ventas con más de 800 ejemplares vendidos en un fin de semana. Las obras vinculadas a las Terres de l'Ebre -sea por temática o por sus autores- han tenido un protagonismo destacado a la carpa instalada en la plaza de Encima de Mora, donde lectores de todas las edades han podido remover libros para todos los gustos. Todo ayuda a consolidar la marca Ebro en el mundo literario, tal como ha asegurado a la ACN la librera Sònia Moreno, que ha participado en esta muestra.

La Feria del Libro Ebrense, que este año celebra la decimonovena edición, se celebra cada año casi un mes más tarde que Sant Jordi. Según Moreno, la fecha escogida no representa ningún inconveniente para el sector, sino más bien el contrario. «Cuando se acerca el 23 de abril, los libreros nos preparamos para la festividad, pero al mismo tiempo ya estamos pensando en la Feria del Libro Ebrense. Para el público, sirve para empezar el verano con literatura», ha añadido.

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