Cultura
El casco antiguo de Tortosa se adentra de nuevo en el siglo XVI con la 25.ª Fiesta del Renacimiento
La organización pide una «discriminación positiva» a la Generalitat para que se implique en la preservación de la celebración
El casco antiguo de Tortosa se adentra de nuevo en el siglo XVI con la 25.ª Fiesta del Renacimiento
El casco antiguo de Tortosa ha vuelto a viajar al pasado con motivo de la 25.ª Fiesta del Renacimiento, que se celebra sin restricciones después de dos ediciones marcadas por la pandemia. El centro histórico se ha engalanado para la ocasión, con paradas de época, tabernas y campamentos para recrear el espíritu renacentista que vivió la capital del Baix Ebre. Después de veinticinco ediciones, el concejal de la Fiesta del Renacimiento, Domingo Tomàs, ha instado a la Generalitat a hacer una «discriminación positiva» e implicarse en la preservación del acontecimiento, tal como se hace en otros certámenes de país. Según Tomàs, este año se podrían superar las 200.000 personas de público, hecho que representaría un retorno a la economía local de unos seis millones de euros.
Algunos de los espectáculos de pago que forman parte de la programación de este 2022 ya han colgado el cartel de entradas agotadas, como es el caso de pases del espectáculo La Taverna d'Enrico, a cargo de Quico el Cèlio, el Noi y el Mutde Ferreries. Otros, de carácter gratuito y para todos los públicos, se reparten por el centro de forma itinerante.
El programa de actos se inició este jueves y se alargará hasta el domingo, día en que la capital del Baix Ebre se despedirá del siglo XVI hasta el próximo año. Hasta entonces, las plazas y calles del casco antiguo se llenan de puestos de todo tipo -desde ropa a gastronomía, pasando por decoración y cosmética natural-, tabernas donde hacer un bocadoy campamentos donde se recrea como era la vida en uno de los periodos más importantes para la sociedad tortosina.
Este sábado, uno de los días fuertes en la programación de la Fiesta, se celebrael acto de entrega de los estandartes a las familias nobles, que representan un reducido grupo con intereses comunes y lazos familiares que controlaban las instituciones y se iban alternando en el gobierno durante la época renacentista.
El punto final de la Fiesta llegará este domingo, con el desfile final desde el parque Teodor Gonzàlez, donde participarán no sólo las familias nobles con sus mejores galas, sino también el resto de agrupaciones que hacen posible el certamen. Posteriormente, se hará el cierre de puertas del portal del Romeo hasta el próximo año.
Una fiesta singular al conjunto del país
Esta es precisamente una de las peculiaridades que distinguen la fiesta de otros acontecimientos de todo el país, que están centrados en la época medieval. A través de un trabajo previo de documentación, la capital del Baix Ebre ha tejido una serie de actos propios para rememorar cómo vivían los antepasados renacentistas en un momento en que la ciudad estaba un referente cultural, político y religioso del país. Este año, además, se conmemora una efeméride que deja constancia del vínculo entre la población y la iglesia; se cumplen 500 años de la entronización como Papa del obispo de Tortosa Adrià d'Utrecht. Por este motivo, se incluye un torneo de justas que tendrá lugar en el nuevo espacio del Clos del Riuy, un espectáculo creado expresamente para la ocasión por la compañía Teatro Los Navegantes, en la iglesia de Sant Domènec.
Desde el Ayuntamiento de Tortosa reivindican la singularidad del certamen, el cual financian mayoritariamente con recursos propios. En esta ocasión, también se suma una dotación especial de unos 100.000 euros provenientes de la Diputación de Tarragona, de un total de 350.000 euros de presupuesto. En este contexto, el concejal de la Fiesta del Renacimiento insta de forma directa a la Generalitat, a quien le reclama una «discriminación positiva»para ayudar a preservar el certamen con una ayuda sostenida en el tiempo.
Actualmente, la fiesta es considerada Fiesta Local de Interés Turístico de Cataluña, pero Tomàs insiste en que hace falta «un apoyo clarísimo»por parte del gobierno catalán de cara a próximas ediciones. Con la mirada puesta al futuro, la organización de la Fiesta del Renacimiento busca reforzar la internacionalización del certamen con la participación de más compañías extranjeras.