La campaña de navegabilidad del río Ebro prevé superar los 33.000 usuarios del año pasado

Este jueves se ha abierto el canal navegable del río Ebro entre Ascó (Ribera d'Ebre) y Amposta (Montsià). El Institut per al Desenvolupament de les Comarques de l'Ebre (IDECE) que lo gestiona pone en marcha también los servicios de soporte, la vigilancia y la ayuda a la navegación, el paso de la recluida del azud de Xerta, la señalización del canal, el mantenimiento de los embarcaderos y la limpieza de algas. El número de usuarios ha crecido exponencialmente los últimos años, por eso se prevé superar los 33.000 del año pasado. El director del IDECE, Josep Maria Sáez, confía en que el caudal del Ebro se mantenga similar al del invierno, a pesar de la sequía, para no interferir en esta actividad, a la que se dedican cerca de una veintena de empresas.

Los parámetros de caudal del tramo final del Ebro para la navegabilidad, sobre todo para las embarcaciones de motor, son de un máximo de 500 metros cúbicos por segundo, en caso de que se produjera una avenida de aguas por lluvia o por desembalses, y de un mínimo de 100 metros cúbicos por segundo (en Ascó) o 80 metros cúbicos por segundo (en Tortosa). En el invierno, a pesar de las escasas lluvias, el caudal se ha mantenido en este intervalo y desde el IDECE confían en que sea así también durante la campaña de navegabilidad, que arranca coincidiendo con la Semana Santa y acaba el 31 de octubre.

Como explica Sáez a ACN, no ha sido tampoco un año especialmente complicado con respecto a macrofitos. Con la vía navegable abierta se pone en marcha el servicio de limpieza «habitual. «No hemos encontrado situaciones de colapso», dice el director. El IDECE cuenta con una embarcación grande que hace el recorrido de Ascó a Amposta, y por «momentos puntuales» si hay alguna concentración, por subidas o descensos del nivel del agua, de puntos en concretos, embarcaderos o pasos de barca, disponen de una segadora pequeña que trabaja allí donde se solicita.

Para evitar que se propaguen plagas como la del caracol maçana o el mejillón cebra, se mantienen algunas medidas para las embarcaciones que navegan por el Ebro con el fin de evitar la propagación de plagas, como son los controles que se tienen que hacer antes de poner la embarcación en el río y después de sacarla. Las barcas reciben un certificado de esta desinfección.

Más turismo, más usuarios

«Como la afluencia de turismo en el territorio ha ido creciendo, uno de los activos que tenemos como la navegación del río, especialmente los kayaks y los barcos Lo Roiget, Lo Llagut y Lo Sirgador, de los ayuntamientos de Ascó, Benifallet o Tortosa, ha ido creciendo», ha remarcado Sáez. La tendencia al alza no se detiene y desde el IDECE esperan que todo el mundo pueda descubrir el río desde dentro, y su entorno, para conocer la Reserva de la Biosfera de las Terres de l'Ebre, los productos agroalimentarios que se hacen. «La navegación juega un papel importante para conocer el eje central de la Reserva que es el mismo río», ha remarcado el director del IDECE.

Nuevo camino de sirga recuperado en Tortosa

Por otra parte, el IDECE financiará con 450.000 euros la recuperación del camino de sirga de Tortosa, entre el barrio de Ferreries y Jesús. Estos pasos naturales junto al río Ebro se utilizaban para remontar el curso fluvial con animales que estiraban las barcas. El nuevo camino de sirga incluye la construcción de un puente para salvar el paso del barranco de los Molins. El proyecto está redactado y se tiene que aprobar definitivamente para tramitar las obras. La vía se unirá con otro proyecto, a cargo del EMD de Jesús, que tiene que conectar el camino de sirga hasta la entrada del pueblo «de manera cómoda».