Política
Junts y Movem-PSC se debaten para ser la lista más votada en Tortosa
Sin embargo, ERC podría tener la clave del gobierno
Mandato definitivo para Meritxell Roigé, alcaldesa de Tortosa, quien se ha volcado a gobernar la ciudad ebrense desde la descomposición del PDeCAT. Roigé busca una reválida del cargo, probablemente la última, después de un funambulesco mandato dónde ha conseguido consolidar la transformación urbanística de la ciudad y la estabilización de las arcas públicas. En frente ha encontrado la pandemia y una oposición más fuerte, con Movem, ERC, Ciutadans y la CUP. Junts per Tortosa ha gobernado en minoría, en solitario y dos años con el PSC, pero Movem - segunda fuerza - ha cerrado una coalición preelectoral con los socialistas, una maniobra para aglutinar soportes y crecer para desbancar Junts. ERC pueden tener la clave del gobierno en Tortosa.
Hace cuatro años Meritxell Roigé obtuvo una agridulce y estrecha victoria electoral. Los siete concejales -y más de 4.300 votos- conseguidos no le garantizaban mantener el gobierno municipal y la alcaldía, un cargo que había recogido quince meses antes, con la renuncia de Ferran Bel -que ocupaba el cargo desde 2007. Roigé se presentaba por primera vez como alcaldable con un proyecto renovado y desacomplejadamente continuista. Bajo las siglas de Junts, aguantó el embate y perdió a un concejal.
Roigé ha liderado un gobierno en minoría, ha afianzado el perfil propio y ha creado su partido, con el que se presenta este 28-M. La formación de Junts per Tortosa ha cerrado a última hora una coalición con Junts per Catalunya, un pacto que evita la dispersión de voto. Seis de los primeros diez candidatos se estrenan y Roigé ha situado de número dos un referente del comercio y el deporte en la ciudad, Jordi Sorolla. Actuales concejales como Mònica Ripoll o Domingo Tomàs repiten en posiciones avanzadas como también Sisco Pepió, de número diez, y Ferran Bel cerrando simbólicamente la lista.
Un mandato con muchos obstáculos
Después de cuatro años con ejercicios de presupuestos prorrogados y una amenazante moción de censura que estuvo a un paso de materializarse, la alcaldesa hace bandera de los hitos alcanzados en este contexto. La transformación urbanística se ha extendido del barrio antiguo al centro comercial, una renovación y reordenación del eixample tortosino con la nueva calle Cervantes, que Junts quiere continuar en la plaza de Alfonso XXII, la avenida de la Generalitat y a los recuperados terrenos de Renfe.
Un espacio, este último, que ha centrado una de las polémicas políticas de mandato. Algunos partidos, sobre todo Movem, defendían conservar los antiguos almacenes como patrimonio industrial y convertirlos en equipamientos de ocio y cultura. Desde el gobierno municipal se defendió que el derribo, ejecutado por Adif, cumplía con el planeamiento urbanístico vigente.
El mandato también ha estado salpicado por cuestiones supramunicipales, como la ampliación del Hospital de Tortosa Verge de la Cinta o la ubicación de un futurible nuevo centro hospitalario de referencia territorial en la ciudad. El Ayuntamiento lo ha resuelto comprando y ofreciendo unos terrenos para un futuro nuevo hospital de las Terres de l'Ebre y ha hecho bandera de las implantaciones industriales en el polígono Catalunya Sud, con inversiones millonarias como las nuevas plantas de Florette, Kronospan o Lucta. La falta de hogares infantiles públicos o la ampliación del Auditorio Felip Pedrell han sido otras de las disputas más vigorosas.
Cambio de rumbo socialista
Para Junts per Tortosa, el PSC no será ya un posible socio de gobierno. El partido forzó un paso al lado de su líder en Tortosa, el concejal y primer teniente de alcalde Enric Roig, una renuncia que se anunció hace un año, pero que tardó en materializarse seis meses, el octubre pasado. La «reflexión» sobre el pacto de gobierno con Junts, que se había cerrado en enero del 2020, acabó con una ruptura de la alianza con sus socios y los tres concejales socialistas en la oposición.
El 28-M se verá qué impacto tiene la nueva estrategia del PSC en su electorado y si avalan una alianza con Movem Tortosa para conseguir desbancar a Roigé. Los socialistas contribuyen a las elecciones con una coalición que relega a un segundo plano el nuevo número uno socialista, Víctor Grau, que ocupará el tercer lugar de la candidatura. Las actuales concejalas del PSC, Dolors Bel y Estefania Valdés se sitúan en el número 6 y 8 de una «lista cremallera», de paridad escrupulosa, liderada por Jordi Jordan, jefe de la oposición en el mandato que acaba y diputado de En Comú Podem en el Parlament.
Coalición para «ganar» en Tortosa
Movem ha hecho esta apuesta para alcanzar el anhelado cambio progresista, que la aritmética había permitido en las dos últimas legislaturas, pero que el contexto nacional, entre otros, no le han permitido concretar. La estrategia es sumar fuerzas de arranque con una coalición progresista Movem-PSC que les permita ser la candidatura más votada, espacio que ocupa la antigua Convergència desde hace dieciséis años. La alianza cuenta con aglutinar los votos que obtuvieron las dos formaciones por separado hace cuatro años - más de tres mil Movem y poco más de dos mil de PSC -, y adelantar a Junts.
Movem Tortosa ha situado a dos de sus candidatos por cada uno de socialista en la lista – paritaria, también en el orden. La número dos será la economista y actual concejala Sònia Rupérez. Detrás del líder socialista Víctor Grau (número 3), se presenta la candidata de Movem de Jesús, Marga Abelló, y el hasta ahora número dos y concejal Francesc Vallespí, que ha sido vicepresidente del Consell Comarcal del Baix Ebre y vicepresidente de la Liga Contra el Cáncer. La candidatura – «plural y transversal»- también cuenta con líderes históricos de la ciudad como Victòria Campos y el exalcalde y anterior subdelegado del gobierno español en Tarragona, Joan Sabaté que cierra simbólicamente la candidatura progresista.
La CUP presiona ERC
La coalición, como también la CUP, vuelve a presionar a ERC para que se posicione claramente por este pacto de las izquierdas que puede dar un vuelco a la gobernabilidad del Ayuntamiento de Tortosa. Ante un futurible escenario de pactos, los republicanos no quieren descartar ninguna posibilidad. Tampoco se oponen abiertamente a un nuevo pacto con Junts, con quién gobernaron en Tortosa en dos de los tres mandatos de Ferran Bel.
ERC «sale a ganar las elecciones» en Tortosa y «en función de los resultados», decidirán «qué alianzas tejer para implementar su programa de gobierno». El candidato republicano Xavier Faura podría recoger frutos electorales de su mandato como presidente del Consell Comarcal del Baix Ebre y mejorar los resultados de hace cuatro años, cuando creció en votos, pero no en concejales (4), y pasó de segunda a tercera fuerza en el consistorio.
Faura se ha rodeado «de un equipo para liderar Tortosa», con Mar Lleixà, directora de Igualdad y Feminismos en el Ebre - anteriormente de Salut – como número 2. Los siguientes puestos en la lista son para los actuales concejales Josep Rima, Maria Jesús Viña, diputada en el Parlament, Pilar Caballé, directora de la Presidencia en el Ebre y detrás se sitúan nuevas incorporaciones como Roger Rodríguez, Ernest Redó, o Yolanda Calau. Cierra la candidatura Josep Rodríguez, nieto del último alcalde republicano, Josep Rodríguez, fusilado por el franquismo.
Al frente de los cupaires se presenta Sergi Arnau, concejal de la CUP Tortosa, desde el relevo a Xavi Rodríguez en julio del 2020. Los anticapitalistas, que tienen un concejal y es la fuerza más pequeña en el consistorio, confía en un electorado fidelizado en la ciudad que le puede dar representación en el Ayuntamiento por tercer mandato consecutivo. Por eso, la CUP quiere ser más fuerte y para poder garantizar la posibilidad de cambio en el gobierno municipal. Detrás de Arnau se presentan las activistas Selene Alberich y Doina Gherta.
Cuatro partidos en la derecha
Por primera vez en la democracia, el Partido Popular no presenta candidatura en Tortosa. Ciutadans les arrancó el concejal que tenían hace cuatro años, pero la formación naranja ahora tendrá que debatirse con tres candidaturas más en el espacio conservador. El candidato de Ciutadans en Tortosa, el actual concejal y portavoz del grupo municipal, Miquel Albacar, sale a defender el cerca del millar de votos que consiguió hace cuatro años y evitar que la dispersión les deje fuera del consistorio.
Además de Cs, concurrirán también Vox -con Montserrat Montanuy de candidata-, Valents -con Joaquim Llopis al frente- y la agrupación de electores que han formado las entidades partidarias y defensoras del monumento franquista de Tortosa, Corembe y Tortosins pel Monument.