Agricultura
Campesinos del Ebre se concentran delante de la CHE para pedir ayudas por la sequía
Unió de Pagesos critica la gestión que ha hecho el organismo de cuenca e insiste en que ha habido falta de planificación
Decenas de tractores llegados de Ponent y las Terres de l'Ebre se han concentrado este martes delante de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) para pedir ayudas urgentes por la sequía que sufren y para denunciar que el paquete de medidas que anunció la semana pasada el ministerio es «insuficiente». Convocados por el sindicato Unió de Pagesos (UP), los tractores salieron el lunes desde Cataluña y han llegado a Zaragoza después de unas 20 horas de trayecto.
Los campesinos critican la gestión que ha hecho el organismo de cuenca de la situación y consideran que ha habido falta de planificación por el cierre de los canales de Urgell y Segarra-Garrigues. El miércoles está previsto que la CHE se reúna con el sector.
Los tractores tenían que llegar inicialmente entre las diez de la mañana y las diez y media en la sede de la CHE pero no ha sido hasta poco antes de las once y media. Después de salir el lunes de Lleida y las Terres de l'Ebre, han hecho noche en la Puebla de Alfindén y este martes a las nueve han reanudado la ruta. No obstante, cuando tenían que cruzar el río Gállego, la policía los ha parado y ha habido que hacer gestiones para finalmente conseguir la autorización para cruzar y seguir hasta Zaragoza.
Jaume Pedrós, responsable de regadíos de UP, ha explicado que pidieron una reunión con la CHE el 20 de abril, días antes del cierre del canal de Urgell, pero no ha sido hasta después de anunciar la movilización que ahora han hecho, que se les ha dado hora, casualmente para el miércoles 17 de mayo. Pedrós ha calificado la protesta de «necesaria» porque la CHE todavía no ha informado de la situación, sobre todo en relación a los abastecimientos que tendrán los campesinos para poder salvar los árboles o parte de la cosecha. «Creemos que tendrían que tener las cosas claras y aconsejar qué tenemos que hacer», ha remarcado Pedrós, que también ha apuntado que «no se puede dejar que cada uno haga lo que quiera».
En la protesta hay participado una cincuentena de tractores pero muchos campesinos también se han desplazado en coche y en total se han movilizado un centenar de vehículos. Mayoritariamente han venido de la zona de canal de Urgell pero también del Delta del Ebro. En este sentido, el responsable del arroz de UP, Albert Ponts, ha lamentado que la previsión de la CHE sea «muy opaca» y que de momento sólo dispondrán de agua por los arrozales hasta la primera quincena de julio. «Esta es el miedo y la incertidumbre que tenemos», ha dicho Ponts, que también ha alertado de que si eso pasa, no se segará ni un kilo del 140 millones de kilos de arroz que se hacen en el Delta. Precisamente por eso, han querido simbolizar esta posible circunstancia repartiendo paquetes de arroz en la protesta; un arroz, que han dicho que será el último que se podrá consumir de Delta mientras dure la sequía.
Dani Forcadell, presidente de la junta rectora del Parque Natural del Delta del Ebro, también ha añadido que las restricciones en el regadío no sólo afectarán en los arrozales sino también en otros sectores como los musclaires, o el sector turístico y toda la biodiversidad porque las aves nidifican en el agua durante la primavera y el verano y si no hay «no hay vida en el Delta».
Unió de Pagesos valoró en 270 MEUR las pérdidas que tendría el sector por el cierre de los canales de Urgell y Segarra-Garrigues y por eso considera completamente insuficiente la ayuda de 270 MEUR para toda España anunciada por el ministerio la semana pasada. De la reunión del miércoles con la CHE, esperan a que «se abra la pared» que tienen en frente y den explicaciones de lo qué ha pasado con el agua. Pedrós ha dicho que ahora ya están «a medio camino» y si hace falta, irán hasta Madrid con tractores.
La CHE dice que adopta medidas desde el verano del año pasado
Ante la movilización, fuentes de la CHE han recalcado que desde el verano pasado se están tomando medidas para hacer frente. En este sentido, han apuntado que el año hidrológico actual está siendo peor que el anterior a causa de las elevadas temperaturas y la falta de precipitaciones. De hecho, entre marzo y abril ha llovido un 70% menos de lo que es habitual en toda la cuenca. La CHE asegura que están trabajando para garantizar los abastecimientos y que trabajan con usuarios, fundamentalmente agricultores, a fin de que las pérdidas y los daños económicos sean menores.
También señalan que este trabajo colectivo se está haciendo con coordinación, colaboración y comunicación. Al mismo tiempo, recuerdan que los órganos colegiados de la CHE, como las juntas de explotación, están representadas por todos los usos, con órganos de participación en la toma de decisiones. Finalmente, lamentan que es una situación «crítica» y que por eso hay que seguir trabajando.