Diari Més

cultura

El juego milenario de la morra asegura el relevo generacional con diecinueve parejas al cuarto campeonato infantil a la Ràpita

La asociación Morràpita extiende en los más jóvenes una tradición inicialmente vinculada a marineros y piratas con talleres escolares

Dos parejas del campeonato infantil de morra, durante una de las partidas celebradas en la Ràpita.

El juego milenario de la morra asegura el relevo generacional con diecinueve parejas al cuarto campeonato infantil a la RàpitaACN

Publicado por

Creado:

Actualizado:

El juego milenario de la morra tiene asegurado el relevo generacional. Así lo han demostrado las diecinueve parejas que han competido en el cuarto campeonato infantil de la feria Orígens a la Ràpita. El cálculo mental, la estrategia y la complicidad entre participantes son determinantes en este juego donde los jugadores muestran simultáneamente un número concreto de dedos de una mano mientras intentan adivinar la suma total gritando con voz alta. El juego, inicialmente vinculado a marineros y piratas, ha traspasado generaciones. Durante doce años, la asociación Morràpita ha reivindicado la morra y lo ha acercado al público joven. «Hacemos talleres escolares y en los últimos cinco años ha subido la calidad del juego y de los participantes», ha afirmado Rafa Balagué, vicepresidente de la entidad.

«Es un juego que cautiva y lo solemos jugar entregadísimos. Cuando entras dentro de una partida de morra, todo aquello que hay alrededor desaparece, sólo estás concentrado en ti y en tu pareja para ganar a los contrincantes», ha expresado Balagué a la ACN. Y es que para jugar a la morra tan sólo es necesario un adversario y agilidad mental para calcular la suma total de dichos que los participantes enseñen a cada turno. Habitualmente, se trata de un juego que se juega de dos en dos donde los ganadores tienen que llevarse dos «cotos», es decir, veinte puntos. Para conseguir anotar un punto, hay que acertar la suma de todos dichos que se muestran en una tanda.

En la Ràpita hace doce años que la entidad Morràpita trabaja para recuperar este juego vinculado inicialmente a los marineros y las tabernas. Precisamente para abrirlo a nuevos públicos, la asociación organiza desde hace años talleres escolares para extender esta práctica entre los niños y niñas a partir de diez años. Según Balagué, en los últimos cinco años han notado un aumento tanto de jugadores como de calidad en las partidas.

Este año, hasta diecinueve parejas han competido al cuarto campeonato infantil de morra organizado en el marco del festival Orígens celebrado este fin de semana. «Tener diecinueve parejas infantiles en esta competición significa un triunfo y que hemos hecho bien el trabajo los años pasados. Ahora ya vienen solamente... vamos a hacer talleres a las escuelas, pero cuando llega el día vienen al campeonato y quieren jugar», ha celebrado el vicepresidente de la entidad.

La morra se aleja de las tabernas para llegar a todos los público

Este año, las sancarlenses Àngela Fibla y Paula López se han proclamado campeonas después de estrenarse como pareja a la competición. Las dos se iniciaron en la morra desde bien pequeñas gracias a familiares que les enseñaron las normas y técnicas a tener en cuenta en cada partida. «Es un juego que por mucho que no lo parezca, ayuda en el cálculo mental. No soy mala en matemáticas, pero tampoco excelente, y la morra me ayuda a hacerlo todo mucho más rápido en mi cabeza», reconoce López.

De hecho, la participación de chicas en estos campeonatos es bastante reciente, tal como ha remarcado Balagué. Tradicionalmente, la morra era un juego de taberna, un espacio donde años atrás las mujeres no acostumbraban a estar presentes. A través de los talleres escolares dirigidos a los alumnos de quinto y sexto de primaria de todas las escuelas del municipio, Morràpita ha despertado el interés de las niñas al tomar parte en este juego. Más allá del campeonato infantil, la entidad también ha llevado a cabo una competición dirigida al público sénior este fin de semana. En este contexto, la organización celebra la posibilidad de contar con el futuro asegurado con un plantel joven con ganas de mantener la tradición viva.

Con ganas de extender la morra en el Montsià y en Cataluña

Aunque la morra tiene una vitalidad garantizada a la Ràpita, la voluntad de la agrupación es esparcirse por toda la comarca. De esta manera, a medio plazo se plantean organizar competiciones al conjunto del Montsià para dar a conocer este juego tradicional a todos los públicos. Antes sin embargo, tienen previsto participar por primera vez al Festival del Dado que se celebrará en Barcelona este noviembre.

Por otra parte, este año dos parejas de Morràpita se han llevado el primero y segundo lugar en el Morramundo, un campeonato mundial donde participan una treintena de regiones donde se juega la morra, como es el caso de Cerdeña, Córcega, Croacia y Eslovenia, entre otros.

tracking