Una nueva exposición del COMEBE pone el foco en las milicianas, enfermeras y víctimas mujeres de la Batalla del Ebro

'Invisibles pero decisivas' es la nueva exposición del COMEBE (Consorcio Memorial de los Espacios de la Batalla del Ebro) sobre el papel de la mujer en la Guerra Civil española y la cruda batalla decisiva en el Ebro. La consejera de Justicia, Derechos y Memoria, Gemma Ubasart, ha inaugurado la muestra este miércoles por la tarde. Se podrá ver hasta julio en el centro de Corbera d'Ebre 115Dies y después iniciará una ruta itinerante sobre todo en centros escolares para llegar a las nuevas generaciones. Recuperar esta memoria colectiva silenciada, la de las milicianas, las enfermeras, las doblemente víctimas en razón de género, es «imprescindible».

En 115Dies se ha reformulado uno de los boxs de la exposición permanente para recordarlas y homenajearlas. La consejera Ubasart ha inaugurado la exposición 'Invisibles pero decisivas. Mujeres en la Guerra Civil y la Batalla del Ebro' después de recibir una visita guiada por la comisaria de la muestra, la historiadora Mary Nash y la directora del COMEBE, Cinta Farnós. La exposición reivindica la memoria colectiva de las mujeres y su papel fundamental durante la Batalla del Ebro y la Guerra Civil, una «mirada feminista» que Ubasart ha reivindicado para parar «los discursos revisionistas».

«Durante años el relato de la Guerra Civil ha sido una historia de hombres explicada a hombres», ha lamentado la consejera. Ubasart ha agradecido el trabajo «ingente» de mujeres historiadoras y de algunos hombres para «romper la mirada patriarcal», que ha permitido conocer la historia de 700 brigadistas internacionales, de las milicianas del frente de Aragón o de las que se agruparon en el secretariado del POUM, en Mujeres Libres o Aliança Nacional de Dona Jove, «luchando en muchos casos ante la incomprensión en muchos casos de sus propios compañeros de militancia».

La muestra también pone el foco en la vida y de las experiencias de miles de mujeres que trabajaron de enfermerías o en tareas de intendencia, «que sufrieron hambre y que murieron bajo las bombas, que trabajaron en las fábricas y en el campo, y que en unas condiciones extraordinariamente difíciles cuidaron a sus hijos y que también perdieron hijos, compañeros y padres que murieron en las prisiones y en el exilio». «Eso es también recuperar el género como categoría histórica», ha reivindicado la jefa de Justicia.

Itinerancia por centros escolares

También Cinta Farnós, directora del COMEBE, ha remarcado que la muestra quiere «traspasar la esfera pública e impulsar el inicio de toda una serie de cambios tangibles para que se reconozca el legado de estas mujeres». Farnós ha pedido a las autoridades que todas ellas tengan el merecido reconocimiento también en la esfera pública. Mary Nash, comisaria de la exposición, ha subrayado el valor educativo y la voluntad que llegue a las jóvenes generaciones con una itinerancia sobre todo para los centros escolares. «Es una herramienta muy necesaria para que se conozca el pasado desde la igualdad», ha dicho la historiadora.

La muestra, de hecho, también habla de las opresiones que sufrieron las mujeres por su condición, como, la utilización de sus cuerpos con finalidades propagandísticas, la representación cultural que se les dio, y las agresiones sexuales, la represión y las vejaciones que sufrieron. Las experiencias compartidas se construyen con el testimonio de cinco mujeres significativas, como Virgínia Amposta Amposta (Pinell de Brai, 1903 - Barcelona, 1938), maestra y dirigente sindical fusilada en el Camp de la Bota, el 8 de agosto de 1938; Natàlia Tarragó Querol (Batea, 1917 – 1941), miliciana de la FAI; Patience Darton (Orpington, 1911 – Madrid, 1996), enfermera de las Brigadas Internacionales durante la Batalla del Ebro, Angelina Sanz Xalé (La Ràpita, 1901 – 1993), pescadora, y una campesina anónima de las Terres de l'Ebre.