El sector de cítricos en las Tierras del Ebro, bajo amenaza por las plagas y las importaciones

La Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC) ha indicado que la cosecha de clementinas y mandarinas ha aumentado un 20% en las Tierras del Ebro con respecto a la campaña pasada. Sin embargo, el sector de cítricos afronta con mucha preocupación la recta final por la «fuerte» competencia de países terceros, así como por «la elevada» incidencia de plagas, como el cotonet de Sudáfrica o la araña oriental. El incremento de producción de este año se produce después de que la cosecha del año pasado fuera más baja del habitual. La producción se cifró en 82.000 toneladas de clementina y otras mandarinas y en 27.000 toneladas de naranja. Con respecto a los precios, han aumentado entre 10 y 15 céntimos por kilo.

Desde la FCAC señalan que este incremento del precio percibido es debido a que la sequía ha provocado una disminución de la cosecha en determinadas zonas de España. «La mejora de los precios ha compensado parcialmente el aumento de los costes de producción y salariales», subrayan en un comunicado.

Con respecto a las plagas, el portavoz de cítricos de la FCAC, Federico Tarazona, ha explicado que han llegado con «la importación de cítricos de fuera de España» y que el calentamiento global «favorece» sus ciclos reproductivos. «Además, la emergencia climática contribuye a la aparición de alteraciones fisiológicas del fruto, que se tiene que sacar del canal de comercialización», ha añadido.

En los últimos años, muchas fincas se han abandonado por la crisis de precios que arrastraba el sector. De las 9.700 hectáreas de cítricos que estaba en Cataluña el año 2012, actualmente quedan unas 8.000. Desde la federación dicen que el abandono de casi 2.000 hectáreas de cultivo provoca la aparición de foco de mosca de la fruta en las fincas que ya no se cultivan, pero que no se han arrancado los árboles.

Por otra parte, la «fuerte» competencia con cítricos importados de países terceros «dificulta» que el consumidor apueste por el producto local como primera opción de compra, y casi el 95% de la producción ebrense se acaba destinando a exportación. Desde la FCAC recuerdan que las cooperativas agrarias producen el 36% del total de cítricos cultivados en Cataluña.